CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- Un nuevo caso de violencia se presentó en Victoria, ahora en la Secundaria General Número 5 “Profesor Juventino Pineda y Ortega”, en contra de una menor de 12 años que estudia el primer año y quien fue golpeada por una de sus compañeras de salón, provocándole lesiones en la columna, un brazo y su cara.
De acuerdo con la afectada, fue el pasado miércoles 10 de junio, cuando una compañera de salón la agredió porque supuestamente la delató con una maestra de no haber participado en un proyecto escolar.
Los hechos, explica, sucedieron en los baños de la escuela, donde la menor agresora la esperó para azotarla contra la pared y el piso, provocándole las lesiones que fueron atendidas en el Hospital Infantil, aunque sólo le recetaron unas pastillas de Ibuprofeno.
Claudia Hernández Vázquez, madre de la menor, relató que se enteró de la agresión a su hija al llegar a la secundaria como cada día a recogerla a la hora de la salida, y unas compañeras del 1 “G”, le dijeron que su hija se encontraba en la enfermería.
Al acudir al lugar y cuestionar al subdirector de la Secundaria, profesor Roberto Balderas Martínez, este sólo le dijo no saber lo que había sucedido y la doctora del plantel comentó que tampoco supo lo que había sucedido, ya que la menor no dijo la verdad porque otras niñas de segundo grado la amenazaron de decir algo.
La señora Claudia al ver los golpes de la menor, llevó a su hija al Hospital Infantil para que la revisaran, siendo acompañada por la doctora, quien no llevaba un documento que avalara que los hechos habían sucedido dentro del plantel escolar.
Agregó que al no contar con el dinero para pagar la consulta, la doctora tuvo que llamar al subdirector para que firmara la constancia de los hechos en la secundaria y de esta manera pudieran darle la atención hospitalaria.
La estudiante de primer año de la secundaria, relata que las amigas de la otra menor obstruyeron el paso en la puerta del baño para que nadie la ayudara.
“Me jaló del pelo y me azotó en la pared, luego me hice para atrás y en eso momento sus amigas me aventaron y me tiraron al piso; allí me dio dos golpes en la cara con el puño cerrado, en la espalda; se subió arriba de mi y me dio dos cachetadas, no me podía parar porque me agarró del pelo y me azotó contra el piso”, recuerda la menor sobre ese incidente.
Señaló que la dejaron en paz, sólo hasta que alguien gritó que el subdirector se acercaba, dejándola en el piso, hasta que otras niñas la ayudaron y la llevaron a la cafetería para darle un poco de agua, llevándola posteriormente a la enfermería, en donde se quedó hasta que llegó su mamá.
De acuerdo a la madre de familia, el Director de la secundaria 5 de esta capital, de nombre Adolfo Cano Galindo, no la atendió en su oficina, sino afuera en una banca, y minimizó los hechos, rechazando que se tratara de un problema mayor, entregándole además un citatorio por la conducta mostrada.
Explica que la alumna que agredió a su hija continúa tomando clases de manera normal, señalándole el mismo director y subdirector del plantel que no podían expulsarla ni hacerle nada, además de que los padres de esa alumna tampoco se han presentado en la escuela.
Por su parte, la menor señala que no quiere regresar a la escuela, ya que tiene miedo de que la vuelvan agredir, luego que ha recibido amenazas de otras alumnas de volver a golpearla si denunciaba los hechos.
De acuerdo a otras alumnas de esta secundaria, las peleas en la escuela son constantes, sin que los maestros o directivos intervengan, ya que en muchas ocasiones las peleas se realizan en un patio cerca de los talleres, en donde se encuentra un autobús abandonado, que sirve para obstaculizar la vista, siendo más los casos en que las jovencitas se agarran a golpes.
De acuerdo con el testimonio de las menores, hay alumnas que han sido corridas por este motivo, aunque en la mayoría de los casos, son las agredidas, quienes no regresan a la escuela por temor a que continúen las agresiones.
Por lo pronto, sólo se presentará a los exámenes finales, luego que el ciclo escolar está a punto de concluir, esperando que el Secretario de Educación la ayude a reubicarse en otra escuela el siguiente año, al igual que a su hermano, quien ya estaba inscrito en primer año de esa secundaria y que tampoco irá por temor a que también sea agredido; así como le explique el motivo de que estos directivos de la escuela, no le dieron la pronta atención médica a la menor, ni le brindaron la ayuda ene se caso.
Señaló que acudirá a la Comisión de Derechos Humanos para denunciar los hechos en que su hija fue agredida y le ayuden a obtener justicia.