El candidato del PRI a la gubernatura, no va a decidirse a partir de una encuesta, como se dijo desde un principio. El posicionamiento, es importante, pero será solo un referente para considerar la nominación.
Son muchos factores los que se van a valorar para decidir quién viene a la contienda. Esto no es de amistades, ni quién junta más gente en los eventos, ni quién está mejor preparado, ni quién tenga más padrinos políticos. La decisión tricolor, incluso va a estar influenciada por la candidatura que decida el PAN.
Sin embargo, hay factores básicos que sí van a ser determinantes y que desde hoy ya se están valorando: Que sea un candidato ganador, que tienda a crecer en las preferencias y que no arrastre negativos.
A partir de ahí se va a confeccionar la designación, pero hasta ahora, no hay nada para nadie; lo que se diga es especulación. Nadie está arriba ni abajo, ni adelante ni atrás; las encuestas que se han filtrado no son del PRI nacional, ni de Los Pinos, ni de la Secretaría de Gobernación.
Las que han aparecido y publicado los medios y las redes sociales, son por encargo de los aspirantes y sus patrocinadores para sacar ventaja o desacreditar a los adversarios.
Tampoco nadie está descalificado. Quien lo afirme o diga lo contrario: miente, confunde y desinforma. Hoy, a ninguno de los ocho que levantaron la mano y
confesaron sus aspiraciones se le ha dicho que paren o renuncien a la contienda. Todos han seguido con su activismo de acuerdo a sus posibilidades, su tiempo y sus ganas.
En cuanto a capacidades y merecimientos todos están iguales. Nadie puede decir que merece ser por su trayectoria, su disciplina o su capacidad. Cada uno ha tenido la oportunidad de vivir y servirse del presupuesto por años a través de cargos que los electores les han dado o sus relaciones que el poder les han regalado.
El afortunado del gran dedo, va a ser aquel que responda a los intereses reales del poder nacional, a los intereses del Estado y a quien garantice la permanencia del priismo en el poder tamaulipeco.
Enrique Peña Nieto es el único que va a decidir, nadie más. Pero antes va a escuchar todas las opiniones buenas y malas. También es falso que vaya haber vetos, como se cree y se dice. Esto no es de caprichos ni de berrinches.
Es una gubernatura la que está en juego, y es un Estado que geográfica, económica y estratégicamente representa mucho para la República. Tamaulipas tiene más de 300 kilómetros con Texas, el Estado más rico de los Estados Unidos. Cuenta con 17 cruces fronterizos por donde pasa el 70 por ciento de las mercancías hacia México y América Latina.
Son más de 400 kilómetros de litoral con el Golfo de México y por aquí está la ruta más corta para llevar la droga a Estados Unidos, y por donde entran casi todas las armas que se comercializan en el continente. Está en juego un pedazo del territorio nacional que ha dado muchos dolores de cabeza al país, pero que tiene una riqueza extraordinaria por encima de otras entidades.
Tamaulipas es un Estado que necesita de un buen gobernador, que entienda y comprenda la
realidad que se vive. Todo esto será valorado para tomar una decisión correcta.
Enrique Peña Nieto ha demostrado en experiencias anteriores que no le gana el corazón, ni las fobias, ni las amistades para tomar las decisiones políticas. El ejemplo más ilustrativo lo dio en el Estado de México, cuando siendo gobernador, se decidió por Eruviel Avila, cuando su corazón y sus intereses latían por Alfredo del Mazo.
Así que nadie se haga bolas. Nadie se ha bajado de la carrera, tampoco nadie va a la punta; todo lo que se diga para ensalzar o desacreditar los proyectos que corren, son deseos y calenturas de los mismos aspirantes y sus seguidores. Los tiempos electorales del IETAM, los tiempos políticos del PRI, los tiempos de Peña Nieto están marcados y no se mueven. Todo lo que se diga es chicharronería barata. La convocatoria no va más allá del 20 de enero, tampoco el destape. Diciembre seguirá siendo el mes de la especulación y de los golpes bajos. Que nadie se diga sorprendido. Los primeros 20 días de enero, están marcados para que se anuncie la gran decisión.
Talachazos
REGAÑAN A RAFA.- Juan Díaz, líder nacional, reprochó y recriminó a Rafa Méndez la opacidad en la que se encuentran las finanzas de la sección 30.
Hace más de 3 meses Juan Díaz firmó un acuerdo en el que presumía que el SNTE sería el primer sindicato del país que abriría sus cuentas y detallaría cómo se manejan las cuotas de los maestros. Todas las secciones cumplieron, menos Tamaulipas y eso enojó al dirigente nacional. La presunción del CEN del SNTE es que Rafael malversó los fondos y no tiene cómo comprobar los faltantes.
Desde que Rafa fue echado de la diputación federal y retomó las riendas de la sección 30, no puede controlar al magisterio que se resiste a trabajar con un líder que se ha distinguido por maltratarlos y traicionarlos.
¿Y LAS VÍCTIMAS DEL DELITO?.- En la Dirección del Centro Integral para la Atención de Víctimas del Delito, nadie sabe nada, nadie atiende y nadie informa sobre lo que está pasando con las víctimas de la violencia en Tamaulipas. María del Rosario García Fuentes, encargada de la oficina, desconoce números, estadísticas y oculta información sobre los casos que ahí se atienden. Falta a su compromiso de transparentar la información y cierra sus puertas a la prensa. Si no informa, entonces se interpreta que no se está haciendo nada sobre este problema tan delicado y tan sensible en el Estado.
LA ARMONÍA DE REYNOSA.- Pepe Elías Leal ha tenido en los últimos días encuentros emotivos con los vecinos de las colonias del municipio, a donde ha llevado obras y regalos a las familias. Los habitantes de
las colonias han expresado su gratitud al alcalde por el trabajo que se ve a través de la pavimentación, alumbrado público y seguridad en las colonias que antes estaban olvidadas.
La armonía entre la autoridad municipal y los reynosenses es un reflejo de que Pepe Elías está haciendo un buen gobierno.