PÁNUCO, Ver.- Momentos de pánico y zozobra vivieron residentes de Pánuco, derivado de la quema de cañales y basureros clandestinos que provocaron la formación de una densa nube que cubrió gran parte de la ciudad.
Fue alrededor de las 16:00 horas del pasado jueves que el siniestro inició a espaldas del ejido Tampuche, frente a la comunidad Buena Vista, justo donde se ubican los cañaverales.
El titular del departamento de la Coordinación de Protección Contra Riesgos Sanitarios, Raúl Nuberg Santiesteban, informó que los vientos atípicos registrados ese día originaron que las llamas se avivaran y como consecuencia comenzaron a extenderse en segundos por las plantaciones de cañas.
Nuberg Santiesteban manifestó que, derivado de este siniestro, tienen conocimiento de que decenas de personas resultaron intoxicadas ya que se atendieron a dos menores en la clínica del IMSS por problemas en las vías respiratorias.
Comentó que diversos basureros clandestinos ubicados, sobre todo en el bordo de protección, también se activaron por lo que el fuego se expandió.
Ello originó que se formara una extensa nube por gran parte de la ciudad que prácticamente cubrió los rayos solares, situación que despertó la preocupación y el miedo de la ciudadanía que no daba crédito a la sucedido.
Y es que conforme transcurrieron las horas las nubes se hicieron más densas.
Cabe señalar que los cuerpos de seguridad regional y local estuvieron atentos a que las llamas no se extendieran a viviendas, por lo que se mantuvo la expectativa.
Alrededor de las 20:00 horas, el fuego cesó, sin embargo las nubes de humo todavía permanecían en diferentes puntos de la ciudad.
Ante esta situación, el titular del departamento comentó que se reunirá con representantes de la Semarnat y responsables del ingenio cañero para buscar mecanismos y evitar ese tipo de prácticas ilegales.
SIGUEN LOS INCENDIOS: FALTA EQUIPO
Los últimos seis días han sido de incendios en Pueblo Viejo y los elementos de Protección Civil los combaten sin contar con el equipo adecuado.
Actualmente tienen que actuar con “hawaianas” que son una especie de mangueras cortadas en tiras o a “ramazos” para controlar los incendios.
Mauro Alpírez director de la dependencia, señaló que las altas temperaturas y la falta de agua pueden duplicar la cantidad de incidentes de este tipo.
Al menos la mitad de los incendios que han combatido en la última semana han sido provocados.