MATAMOROS, Tamaulipas.- Al menos 17 usuarios de la Unidad de Especialidades Médicas (Uneme) en Hemodiálisis de Matamoros estarán imposibilitados de recibir el tratamiento a partir de la próxima semana porque se carece del material y se les ha pedido que lo solventen, lo cual ya ha comenzado a afectar a algunos con la reducción de las sesiones que requieren para evitar perjuicios a su estado de salud.
Angustiados porque su vida “depende de una máquina”, al menos cuatro de los pacientes han solicitado la ayuda de autoridades para resolver esta problemática ya que carecen de recursos para comprar los productos que requieren mientras se someten al procedimiento.
Y es que el encargado de la Uneme, Sergio Alberto Menchaca Alanís, declaró que por el cambio de administración estatal la autoridad superior sólo envió material que alcanzaría hasta la primera quincena del mes en curso.
“A los pacientes se les comunicó que si deseaban recibir el tratamiento necesitaríamos que ellos consiguieran su propio material y les dimos una lista”, dijo.
Cumplidas las primeras dos semanas, los pacientes tienen incertidumbre de lo que vaya a suceder la próxima semana ya que desconocen si ya tienen que llevar los artículos solicitados o todavía podrán utilizar el servicio como lo han hecho durante los últimos años.
‘Dependemos de una máquina’
Desde julio se les avisó a las personas que no habría insumos para atenderlos, por lo que tendrían que desembolsar de su bolsillo para adquirir 25 materiales y algunos medicamentos señalados por el médico.
Marvelia Ramos Blanco, de 35 años, originaria de Matamoros, expuso que les indicaron que por el cambio de gobierno se presentaría la escasez y que persistiría hasta que el gobierno entrante interviniera.
“Nos dijeron desde julio que se iba a terminar el material y que esto podría alargarse hasta febrero. Eso no es posible, dependemos de una máquina, nuestra vida depende de una máquina”, dijo.
La entrevistada afirmó que en sólo cinco artículos de la lista que les cedieron son 900 pesos, lo que multiplicado por tres sesiones daría un total de 2 mil 700 pesos por semana que estarían obligados a aportar para no suspender la hemodiálisis.
Ramos Blanco expresó que a raíz de las movilizaciones que inició un grupo de usuarios han obtenido algunas donaciones, pero su objetivo es que se les asegure su tratamiento para el resto del año, sin contratiempos.
Primeros síntomas
Aunque el servicio no se ha suspendido en la unidad de hemodiálisis, ubicada a un costado del Hospital General Dr. Alfredo Pumarejo, las sesiones se han reducido, lo que ha perjudicado a varios pacientes.
José Humberto Torres Ramírez, de la colonia Independencia, indicó que desde hace unas semanas se les disminuyó el método con la finalidad de que el material alcanzara para más días en la instancia.
“Recibía tres sesiones pero ahora sólo dos. Y la otra me hace falta, me he sentido mal, me da mucho dolor de cabeza y me da por vomitar”, explicó.
Anteriormente acudía lunes, miércoles y viernes, pero ahora sólo lo hace a inicio y el fin de semana, circunstancia que ha mermado su salud ya que no tiene acceso a servicios privados donde por cada sesión cobran mil 600 pesos.
Torres Ramírez informó que paga 170 pesos cada que acude a realizarse la hemodiálisis, por lo que para él es fundamental que el relevo entre gobiernos no detenga las actividades porque su salud correría peligro.
Por resolver
La unidad es independiente del Hospital General Dr. Alfredo Pumarejo pero la directiva se comunicó a Victoria para buscar una solución a este conflicto que tienen en vilo a 17 usuarios con insuficiencia renal.
El titular del mencionado hospital, José Antonio Alfaro Caballero, expuso que desconocen lo sucedido con los insumos, pero a través de las denuncias que ciudadanos han realizado entablaron diálogo con autoridades superiores para obtener una respuesta.
Alfaro Caballero expuso que se logró una donación para las personas que se presentaron para pedir la ayuda, aunque lo ideal es que la unidad funcione y preste la atención médica a las personas.
De no solucionarse la falta de material, es posible que a inicio de la semana que entra surjan casos de personas que no podrán acceder a la hemodiálisis porque no cuentan con dinero para comprar el material que solicita la dirección de la Uneme.