Una de las claves para que Óscar Almaraz sacara adelante su proyecto político en el ayuntamiento capitalino, fue justamente su proclama de cambios urgentes y su decisión de rescatar a ciudad Victoria de la inseguridad y del abandono.
El alcalde victorense tiene habilidades como gestor de recursos, y creemos que desde el inicio de su administración empezará a tocar puertas, y construirá una relación de convivencia política con Cabeza de Vaca.
Convencer con trabajo al gobernador, y al mismo tiempo crear espacios de gestoría y trámite en la ciudad de México, son los dos primeros pasos que le marca el librito a Óscar. Entre sus ventajas destaca que no se ha chocado con nadie, y cuenta con el aval de los sectores sociales y de la iniciativa privada.
Ya lo dijimos en anteriores colaboraciones y lo reiteramos: limpiar a Victoria de todo lo negativo y colocarla en el pedestal de las capitales de estado más modernas y funcionales, conviene tanto a priistas como a panistas.
“Vicky” city, sigue siendo la casa del poder público tamaulipeco. Y lo más conveniente es que entre ambas instituciones, la estatal y la municipal contribuyan a sanear y a rescatar a la hermana mayor de la región centro, hasta ahora golpeada por cuotas y secuestros.
Si ciudad Victoria empieza a mostrar signos de recuperación en materia de seguridad, ello se proyectará en una mejor imagen para los dos grupos políticos que a partir de este sábado compartirán el espacio urbano, con sólo una plaza y una avenida de por medio. Cabeza y Almaraz, deben de iniciar cuanto antes la Operación Victoria. Tanto al gobernador como al alcalde, pero sobre todo a las familias, conviene esa política del buen vecino.
La lucha interna por el gabinete
Una vez que el cabecismo se ha consolidado como grupo en el poder político, están aflorando las tendencias y las disputas naturales entre las diversas facciones cercanas al nuevo mandatario estatal. En la vorágine del forcejeo por las principales posiciones, emergen los celos políticos de aquellos que se consideran como los cabecistas químicamente puros.
La grilla interna por alcanzar las principales posiciones del gabinete entrante alcanzan este martes 27 de septiembre, su máximo punto de ebullición. De hecho, se sabe que las llamadas privilegiadas para los varones de la elite cabecista, estarían fluyendo entre ayer y hoy. Después de estos dos días claves del reacomodo, aquellos blanquiazules que no sean objeto de la anhelada llamada del poder, podrían quedar fuera.
Los planteamientos formulados por el nuevo gobernador Francisco García Cabeza de Vaca, en el sentido de ciudadanizar el poder forman parte de las expectativas creadas. Aunque el punto más relevante de este tema, es que el día primero de octubre, la sociedad tamaulipeca cuente con un gobierno donde todos y cada uno de sus integrantes, no tengan cola que les pisen. De su talento y de su capacidad, nadie puede dudar desde el inicio dado que se requiere cuando menos de un año, o de los primeros seis meses para una evaluación más certera.
Habrá que ver quiénes son, dice el PRI
Los priistas se van a esperar para ver cuál es el sello que define al próximo gabinete estatal del PAN, y ya en función de esa circunstancia emitirán sus opiniones, dijo ayer el coordinador tamaulipeco de la bancada tricolor en San Lázaro, Édgar Melhem Salinas.
—¿Los invitaron a la toma de protesta?. Claro que sí, y ahí estaremos, como una oposición responsable, dijo el legislador riobravense, mismo que informó sobre las importantes acciones que se vienen realizando en la Cámara Baja, con el propósito de dotar de un presupuesto responsable a la entidad.
—¿Qué va a pasar con los ayuntamientos priistas a partir del primero de octubre?
“No los vamos a dejar solos”, advierte Melhem.
Un debate… de ruleta rusa
A las ocho de la noche, hora de México, dio inicio el debate entre la candidata demócrata Hilary Clinton y el republicano Donald Trump. Más allá de la percepción que tengamos como mexicanos acerca de este encuentro, lo relevante es la batalla posterior que se desatará entre grandes sectores estadounidenses para decidir quién se alzó como triunfador. Si el adagio de que caballo que alcanza gana, se hace realidad, podríamos decir que Trump podría colocarse ya en la delantera de la carrera por la Casa Blanca.
Si Trump ganase la elección presidencial del ocho de noviembre próximo, temas locales tamaulipecos, como el adiestramiento de policías estatales en Texas, sufrirían un serio reajuste. Se prevé que la era Trump, implicaría un fuerte sacudimiento en la relación México-estadounidense, en la cual, por supuesto,
tendrían mucho que ver entidades fronterizas como la nuestra.