He aprendido a querer poco
Porque si se quiere mucho todo es muy poco.
Y he aprendido a querer
Mucho porque poco no es nada. Entre poco y mucho el amor es algo y nada.
O es algo que parece nada.
Entre una y otra cosa estará el fiel de la balanza:
Quiere mucho para nada o querer poco por nada.
A veces pienso que el amor es una operación suma y resta. Cercano a la matemática y no al corazón.
O quizás es una matemática razonada que suma o resta y hasta multiplica en las leyes de las convenciones sociales.
Si quieres poco dudan. Si quieres mucho dudan más.
El amor es así una incredulidad razonable..
Cuando el amor se va se empieza a amar
Pero ya no es nada porque era poco.
O era mucho porque no era nada.
Es mejor no saber nada de nada
Y todo de todo para nada.
Así, el amor es ni poco ni mucho. Porque es todo o nada.
( Aforismos y otras seducciones de la poesía y el amor. Libro de próxima aparición)