CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- Una persona completamente ebria, dejó varias piezas dentales sobre el pavimento, pues al atravesarse de forma imprudente sobre los carriles de una transitada arteria llevando en manos su bicicleta, fue atropellada por un camión propiedad de una reconocida mueblería.
El reloj marcaban las 12:40 horas cuando los elementos de la Policía Estatal Acreditable, solicitaron por vía radio, el apoyo de los paramédicos de la Cruz Roja, ya que sobre el Eje Vial y cruce con calle Matamoros había una persona atropellada.
En cuestión de minutos, los técnicos en urgencias médicas, Jair Herrera y Ángel Walle arribaron a bordo de la unidad 308 de la Cruz Roja, delegación Victoria, para brindarle los primeros auxilios a Isidro Hernández Saldaña, de 75 años de edad y con domicilio en la Colonia Héroe de Nacozari.
Esta persona mejor conocida como “Chilo” quien también es integrante del escuadrón de la muerte, sufrió la pérdida de varios dientes, pero debido a su estado inconveniente actuó renuente con los cuerpos de auxilio, quienes por más que intentaron, no pudieron darle una atención pre hospitalaria adecuada.
Por su parte, los elementos de Tránsito Local por conducto del perito Ariel Yussef Rodríguez Hernández, reveló que el lesionado caminaba en dirección al poniente sobre la calle Matamoros llevando consigo una bicicleta tipo Bufalo.
Debido a su nivel alto nivel de alcohol, al llegar al Eje Vial, “Chilo” cruzó sin fijarse y se atravesó al paso de un camión marca Volkswagen modelo 2015 propiedad de una mueblería.
Esta unidad era guiada de norte a sur por José Erasmo Nava Saldaña, de 35 años de edad y con domicilio en el ejido Guadalupe Victoria.
El empleado aseguró que el briago individuo se le atravesó de manera imprudente y pese a que trató de esquivarlo no pudo evitar embestirlo y lanzarlo a la carpeta asfáltica.
En esos momentos, una patrulla de Fuerza Tamaulipas pasaba por el lugar y de inmediato se detuvo para pedir el arribo de una ambulancia.
Tras negarse a ser atendido, Isidro tomó su bicicleta y siguió su camino tambaleante, ignorando la petición de las autoridades que se quedara en el lugar.