La zona metropolitana del sur de Tamaulipas se colapsó. Se inundó. El caos se extendió por calles y avenidas.
Las torrenciales lluvias que cayeron, con suma intensidad, entre las 7 y las 10:30 horas de ayer, provocaron inundaciones en las zonas bajas de Tampico, Ciudad Madero y Altamira.
Tres horas y media de lluvia en la zona conurbada sureña derivan, bien se sabe, en lo que sucedió: la virtual paralización de las tres ciudades y de sus actividades productivas.
En Tampico, las colonias más afectadas eran ‘La Borreguera’, López Portillo, Enrique Cárdenas, México, Germinal, ubicadas en la zona norte.
Los drenes pluviales que atraviesan esa zona se desbordaron. El agua inundó las calles y, peor aún, entró a las casas. Muchas familias perdieron sus bienes, sobre todo muebles y aparatos electrodomésticos.
Lo mismo sucedió en la colonia Santa Elena de Altamira, la que se encuentra cerca de Tampico. La única forma de entrar a esos sectores era con los camiones del Ejército, que una vez más tuvo que entrar en acción.
De hecho, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) aplicó, ante el estado de emergencia, el Plan DNIII. Así de grave se puso la problemática en cuestión de horas. Afortunadamente, la lluvia dejó de caer después de las tres de la tarde, si bien el pronóstico era que volvería a llover con intensidad durante la madrugada de hoy.
En Ciudad Madero las afectaciones fueron tremendas. La cancha del Estadio Tamaulipas, situado en la urbe petrolera en su totalidad, ¡también se inundó!
Ante la situación de emergencia, los tres alcaldes de la zona metropolitana se enfocaron desde temprano a atender los problemas ocasionados por las inundaciones.
Andrés Zorrilla Moreno, presidente municipal de Ciudad Madero, como ya lo había hecho desde el primer día de su gestión, acudió a las zonas más afectadas. Además, siempre mantuvo contacto con los medios de comunicación para informar con puntualidad y precisión.
Esto fue muy importante -informar de manera clara y directa por parte de la autoridad municipal- ya que, como suele suceder, a través de las redes sociales circularon rumores sobre hundimientos en colonias como la 20 de Noviembre con consecuencias fatales. Esas versiones resultaron, por
fortuna, falsas.
El alcalde Andrés Zorrilla intervino de inmediato para evacuar a las familias que resultaron afectadas en las colonias Revolución Verde, Ampliación Revolución Verde y Ampliación Emiliano Zapata, situadas en el norte de Madero. Fue una intervención oportuna.
En tierras jaibas, Magdalena Peraza Guerra recorrió por la tarde ‘La Borreguera’. Ahí dialogó con el director de la Comisión Nacional del Agua Cuenca Golfo Norte, Rubén Quiroga Peña. La alcaldesa porteña le solicitó al funcionario federal que se aprueben obras que resuelvan el problema de fondo. El titular de la Conagua dijo que se revisarán los proyectos en coordinación con el gobierno del estado a fin de darle para adelante.
Alma Laura Amparán, presidenta municipal de Altamira, también acudió directamente a las colonias con mayores afectaciones. Acompañó a los elementos de la Sedena para entrar a los sectores inundados.
Por la noche, el gobernador de Tamaulipas, Francisco García Cabeza de Vaca, llegó a Tampico para reunirse con las autoridades de la Marina y de la Defensa Nacional, así como con los alcaldes de la zona metropolitana, para supervisar las acciones emprendidas en las colonias que sufrieron las más severas inundaciones.
Desde temprano, el gobernador del estado tenía el reporte pormenorizado de lo acontecido en la zona sur. Siempre estuvo al tanto. Hoy se realizará una evaluación a fondo.
Como bien lo dijo el mandatario estatal en la entrevista que concedió a la prensa local, la intensidad de estas lluvias no estaban pronosticadas. Ni la Conagua tenía contemplada una lluvia de esta dimensión.
De hecho, por la mañana de ayer, en el noticiero de Televisa, conducido por Carlos Loret de Mola, ‘el Capi’ que informa el estado del tiempo -regularmente con mucha precisión- al hablar de Tampico dijo que había llovido y que ya iba a dejar de llover. No sucedió así. Nadie lo pronosticó.
De hecho, el pronóstico es una predicción, un vaticinio… que puede fallar, sobre todo en estos tiempos de cambio climático. ¿Lluvias intensas en el sur de Tamaulipas… en noviembre?… Sí, en noviembre. ¿En otoño?… sí, en temporada otoñal. ¿Qué tal? Así sucedió.
Esperemos que hoy las cosas mejoren en las zonas más afectadas por las inundaciones en Tampico, Madero y Altamira. La colaboración de los tres niveles de gobierno, seguramente, dará resultados.
Y PARA CERRAR…
¿La causa de fondo de las inundaciones de ayer?… Para comenzar, el sur de Tamaulipas se encuentra rodeado de agua… un extenso sistema lagunario… dos ríos… Además, llovió mucho en pocas horas.
Otro aspecto: el problema del crecimiento urbano, el cual sepultó una gran cantidad de lagunas en los tres municipios durante las décadas de los setentas, ochentas y noventas.
Las invasiones y la venta de predios ilegales fue descomunal bajo el amparo del viejo régimen político. Esa es la realidad. Hoy se pagan las consecuencias.