CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- Convocados por la Diócesis católica de Victoria, cerca de 18 mil personas marcharon y se reunieron en el estadio Marte R. Gómez de esta capital para pedir por la paz y exigir un alto a la violencia que sufren ciudadanos y religiosos.
“En esta celebración estamos pidiendo por la paz, por la no violencia en nuestra diócesis, estado y país. Hoy recordamos a aquellas personas que se encuentran desaparecidas, entre ellas, al padre Carlos Ornelas Puga”, dijo el Obispo Antonio González Sánchez, quien dio la bienvenida a los presentes.
Provenientes de los 22 municipios que conforman la Diócesis de Victoria, los feligreses, sacerdotes y monjas marcharon desde diferentes puntos de la ciudad a muy temprana hora para reunirse todos en el estadio.
Feligreses de Bustamante y del resto del Altiplano, así como los de Soto La Marina, Abasolo, Méndez, Cruillas, San Carlos y Victoria, que forman parte de los 22 municipios de la Diócesis, oraron, cantaron y agradecieron, pero con más fervor pidieron para el restablecimiento de la paz.
Esta concentración comunitaria fue, además, un día de reunión familiar, de fervor religioso, en que hubo manifestaciones alegres con los cuadros de danza que acompañaron las marchas, así como de solemnidad en la misa y la evocación de la paz.
A las 9:00 de la mañana fue escenificada una obra con la parábola del Hijo Pródigo, que expresa la importancia del arrepentimiento y de regresar a la senda del bien y la paz.
Inseguridad no cesa
En su homilía, el Obispo Antonio González Sánchez recordó el mensaje del Papa Francisco y pidió que la misericordia no muera sino que perdure y sea llevada a las parroquias, familias, empleos y escuelas.
Al término de la misa, dijo que lamentablemente la inseguridad no cesa, sin embargo, los fieles seguirán orando para que retorne la paz.
Recordó al sacerdote Carlos Ornelas, quien cumplió este mes tres años de haber desaparecido sin que haya avance en las investigaciones que realizan las autoridades.
González Sánchez agregó que así como el padre Ornelas, hay muchas más personas desaparecidas y aunque las parroquias no llevan una cuenta de estos trágicos acontecimientos, es sabido que son miles a quienes sus familias lloran la ausencia.
“No llevamos control pero son más de mil, son miles en la diócesis”, recalcó.
…Lo que no logra el “Corre”
En la entrevista el Obispo dijo también que gracias a Dios se logró llenar el estadio a pesar de que se había anunciado mal clima, e incluso bromeó al señalar que hubo mejor entrada que cuando juega el Correcaminos.
“Lo que no logra el “Corre”, lo logramos nosotros, así que gracias a quienes respondieron al llamado”, señaló el Obispo.
Finalizado el servicio religioso, el público liberó al cielo miles de globos blancos en señal de oración para que cese la violencia y la inseguridad, y retornen las personas desaparecidas.