EL MANTE, Tamaulipas.- Tras la inhabilitación de la Junta Especial Número 3 de Conciliación y Arbitraje, trabajadores que mantienen un proceso de demanda laboral solicitan la pronta intervención de la autoridad; toda vez que los términos para la celebración de sus audiencias retrasan la posibilidad de recibir el finiquito tan esperado por muchos de ellos, al encontrarse en situación de desempleo.
Con el número de expediente 11958, Flor Janeth González Alvizo mantiene demandada a una empresa de esta localidad, fue despedida en el mes de diciembre del 2015, la causa despido injustificado; a partir de esta fecha ha iniciado todo un viacrucis para que se le liquide conforme a la ley.
Su audiencia de conciliación con los patrones se tenía programada para las 11:00 horas del miércoles 16 de noviembre, siendo informada la extrabajadora que por encontrase acéfala la oficina la Junta Local de Tampico, se decidió inhabilitar la actividad de la oficina y por consecuencia su audiencia quedó suspendida hasta nuevo aviso.
“Me están violando mis derechos como trabajadora, tengo un año buscando una liquidación justa, por fin se concreta una audiencia de conciliación con la empresa, nos presentamos y se nos informa que se cancela hasta nuevo aviso; llevo un año sin trabajo y requiero del dinero que la empresa me debe por concepto de liquidación”.
Y es que, después de haber trabajado siete años como vendedora de la empresa en mención, fue despedida el pasado 18 de diciembre y al considerar esta acción como fue de la ley, inició el proceso de demanda por despido injustificado.
“Yo esperaba que se me diera mi liquidación en el mes de diciembre, ya casi estábamos en acuerdo en los términos era cuestión de afinarlos; pero ahora al declararse inhabilitada la junta, nos deja en la indefensión a quienes llevamos un proceso y más aun a los compañeros que seguirán despidiendo en próximas fechas con motivo del fin de año; ahora están peor porque no existe una autoridad que los represente o defienda”, dijo la afectada.
Con este hecho, ésta y otras demandas laborales quedan literalmente en el “congelador”, hasta nuevo aviso; lo cierto es que cualquier trabajador que sea despedido sufre de violencia a sus derechos, toda vez que la Procuraduría del Trabajo no se encuentra en funciones por falta de titular y lo mismo ocurre con la Junta Especial, instancia que mantiene más de 200 expedientes creados desde julio del 2015 a la fecha.