MATAMOROS, Tam.-El Centro de Atención al Menor Fronterizo (Camef) de Matamoros ha sido sobrepasado por la demanda y actualmente hay 35 personas, cuando sólo está diseñado para 32, y aunque se pudiera presentar una crisis carecen de un plan para contener la situación.
De los que son resguardados en las instalaciones, sólo uno es mexicano, originario de Veracruz, mientras el resto son centroamericanos que están a la espera de que el Instituto Nacional de Migración (INM) termine el proceso para su repatriación.
“Las autoridades de migración están acelerando el trámite con los consulados de los originarios para acelerar su salida antes de que finalice el año”, dijo Lorena Villarreal García, directora de la instancia.
La entrevistada indicó que están saturados y que en el caso de que en el transcurso de los días arriben más niños y adolescentes se desconoce el procedimiento para otorgarles los servicios sin incumplir con las normas establecidas.
Señaló que es indispensable contar con una alternativa en el caso de que sigan llegando más migrantes, aunado a que se requiere una inversión para ampliar el lugar.
Mencionó que lejos de disminuir la llegada de niños y adolescentes centroamericanos a la frontera, el fenómeno migratorio va a la alza pues tan sólo en el año en curso se han alojado a 190 personas en el Centro de Atención al Menor Fronterizo (Camef), contra 165 que durante el 2015 se les brindó asistencia.
Reveló que el arribo al albergue ha persistido y en la recta final del año se ha incrementado la demanda de los servicios que se prestan en el lugar.