CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- Miles de fieles acudieron al Santuario de la Virgen de Guadalupe a cantarle las tradicionales “mañanitas”, en la noche previa en que se conmemoran 486 años de su aparición al indio San Juan Diego en el cerro del Tepeyac.
El fervor religioso y el buen clima que ofreció 19 grados centígrados y sin lluvia, animó a los feligreses a llegar con oraciones, cantos y plegarias de agradecimiento hasta la réplica de la imagen de la madre de Dios.
En las hileras de personas que se formaban para entrar ordenadamente al templo, se pudo ver a quienes portaban un retrato de un familiar desaparecido, quienes con súplicas del corazón le rogaban a la “Morenita” les concediera el milagro de su regreso.
Hubo quienes hicieron su entrada de rodillas como don Cirilo Zavala Zúñiga, que así quiso agradecer que su hijo Mariano Zavala, saliera con bien de un trasplante de riñón.
Los cuadros de danza se contaron por docenas, quienes con sus vistosas vestimentas se turnaban para danzar frente a la imagen de la Guadalupana, en un acto de colorida y bulliciosa fe.
Los niños más pequeños lucían atuendos de manta emulando a San Juan Diego y las niñas llevaban vestidos de indígenas prehispánicos como lo marca la tradición.
En los alrededores del templo y frente al atrio, la vendimia de antojitos, dulces y recuerdos religiosos estaba presentes, en cuyos puestos se arremolinaban las familias para gusto de los marchantes.
Cerca de las 11:00 de la noche, los diferentes grupos de laicos formaron una valla en apoyo de la gente que ya comenzaba a tomar sus lugares en la escalinata frente al templo para participar de la misa.
En la homilía, el obispo Antonio González Sánchez, invitó a los presentes rogar a la Santa María de Guadalupe su intercesión ante su hijo Jesucristo para que se restablezca la paz.
“Que alcancemos la paz, que desaparezca de nuestro país, de nuestro estado, de nuestra diócesis y de nuestra ciudad la violencia, pidámosle a María su intercesión para poder vivir en tranquilidad, poder vivir en armonía”, exclamó.
También pidió orar por aquellas familias que sufren el dolor de un ser querido muerto a causa de la violencia, que sufren la tristeza de un ser querido desaparecido y que dentro de su pena encuentren el consuelo de Santa María de Guadalupe.
“Que ella les proteja, que ella les acompañe y sea el bálsamo para su pena, para su tristeza y entonces el 12 de diciembre tendrá un sentido más fuerte, más amoroso, dejemos que María nos abrace, que nos consuele y nos fortalezca”, dijo.
Al concluir la misa, los miles de fieles reunidos entonaron las tradicionales “mañanitas a la Virgen de Guadalupe, en una jornada más de la manifestación religiosa más importante de México y de Latinoamérica.
Para este 12 de diciembre se espera que asistan al templo unas 3 mil personas más, quienes podrán participar de las misas que se estarán celebrando desde las 6:00 de la mañana hasta las 9:00 de la noche.