Como sucedió con el gobierno de Egidio Torre Cantú, los de los municipios de Tampico, Madero y Altamira, también quedaron a deber.
Y no únicamente deudas estratosféricas que dejaron a las administraciones actuales sino porque las obras que prometieron, por causas y motivos diversos, no se realizaron o se quedaron a medias.
La construcción de los nuevos mercados municipales, que sería la obra cumbre de la gestión del alcalde Gustavo Torres Salinas, sólo incluye la de los centros de abasto Madero y Benito Juárez, la del Morelos tendrá que esperar a mejores épocas, por falta de recursos.
Si no hay contratiempos, la de los dos primeros será terminada el último día del mes de Marzo del 2017.
El rescate de la Plaza Hijas de Tampico se concretó, lamentablemente, el espacio que antes ocupaba el adefesio del Mercado Gastronómico adolece de fallas que no se han corregido. En los días soleados es un sitio ideal para el esparcimiento comunitario, pero cuando llueve se convierte en una alberca.
En donde las cosas no salieron bien al ex munícipe fue en el rubro de la transparencia. A decir del presidente de la comisión del ramo, el regidor Antonio Heredia Niño, se han detectado facturas que no corresponden a las obras declaradas, proyectos para obtener recursos federales que no coinciden con las obras realizadas en la facturación, que aclarará la Auditoría Superior del Estado, en cuyas manos se encuentra el caso.
Y los préstamos a síndicos y regidores que violan la ley, entre otras irregularidades, tienen al ex jefe edilicio porteño en la cuerda floja.
En la urbe petrolera el presupuesto que se ejerció a lo largo de los tres años sólo alcanzó para dar mantenimiento a la infraestructura urbana.
La encabezada en Altamira por Armando López Flores fue la más decorosa y productiva de los municipios del área metropolitana.
Entre las obras más importantes logradas en el trienio que terminó el pasado 30 de septiembre destacan, además del nuevo palacio municipal, que con todo y los defectos que registra el inmueble le han dado una mejor imagen al centro de la ciudad, el complejo administrativo, la biblioteca y la casa de la cultura.
La buena nueva de la semana, por otra parte, fue la prohibición de la venta de cohetones y toda clase de artículos elaborados a base de pólvora decretada por el gobierno de la presidenta de Tampico, Magdalena Peraza Guerra, con el propósito de lograr un saldo blanco de las festividades de la navidad y el fin del año.
El problema ahora será hacer respetar la disposición ya que, desde que se inició el último mes del año, la tradición de tronar los cohetones se registra a diario por todos los rumbos del puerto, a pesar de los accidentes que año con año sufren, principalmente los menores de edad, por el uso de los artefactos explosivos.
Si no hay cambio de planes, por otra parte, dos conocidos políticos de ciudad Madero sólo esperan a que pasen las fiestas decembrinas para intensificar gradualmente sus promociones políticas de cara a la elección del cada vez más cercano 2018, uno de ellos es el diputado local Joaquín Hernández Correa, a quien acaban de expulsar del PRD, otro, el panista Agustín de la Huerta Mejía.
Lo que no se sabe aún es si Joaco lo hará como candidato independiente o por algunas agrupación de izquierda, como el PT o el Movimiento Ciudadano.
Guty, en cambio, según dicen sus allegados, está determinado a pelearle a Andrés Zorrilla la candidatura de Acción Nacional, no obstante que sabe que el titular del ayuntamiento es el que cuenta con el visto bueno del gobernador.
Hablando de otros asuntos, el alto mando nacional del PRI perdió una oportunidad única para congraciarse con los ciudadanos dándoles un buen regalo de navidad, pedir a sus 207 diputados federales renunciar al criticado bono navideño de 150 mil pesos que, junto con el resto de los integrantes de la Cámara de Diputados del Congreso Federal, se autoasignaron los legisladores.
Desafortunadamente, dejó en libertad a los representantes populares para recibir o rechazar la prestación económica que ha sido reprobada casi unánimemente por la sociedad que la califica de insultante en momentos en los que millones de mexicanos no tienen ni para comer.
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