* El autor es Premio Nacional de Periodismo 2016.
Como sabéis este lunes Peña Nieto “atestiguó” la firma de un acuerdo entre patrones y líderes de trabajadores mediante el cual se establece el compromiso de que el gasolinazo no afecte la economía familiar. Hagamos la anotación de que la Coparmex no participó considerando que el documento en cuestión está incompleto, “ya que debe ser fruto de un verdadero y amplio consenso social y no sólo estrategia de comunicación o imagen pública”. ¡Rájale!. Además de que fue entregado apenas dos horas antes del evento para su firma y por lo tanto no hubo tiempo para analizarlo “con serenidad y paciencia” (como diría Kalimán). Está por demás señalar que dicha organización es la más poderosa dentro del Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
De manera que los dueños del capital y la dirigencia obrera se reunieron para reordenar la economía nacional y determinar que la histórica felicidad mexica no
se altere por un pinchurriento incremento a los combustibles el cual nos coloca, ahora sí, al nivel de los países del primer mundo. Sólo por esto debiéramos
aplaudir (y con las dos manos) a la santa alianza de partidos y políticos siempre listos para hoder a la república ante la más leve insinuación.
¿Habrá quién crea que el citado acuerdo se cumplirá?. Fuera del gobierno y sus aliados difícilmente. Y menos con la fama que se cargan quienes lo firmaron empezando por los líderes obreros que siguen siendo monedita de cambio en este tipo de simulaciones. Y en cuanto a los patrones vaya usted a saber si de pronto decidieron renunciar a esta oportunidad de agrandar sus riquezas mediante este regalote de año nuevo. ¡Pamplinas!.
En este sentido el escribidor opina que más bien se trata de una acción desesperada de gobierno en el afán de contener el enojo popular que poco a poco va encontrando canales de organización que podrían crear nuevos escenarios de poder muy distantes a la anarquía oficial que observamos. Elemental, ¿quién garantiza que los productos de la canasta básica no elevarán su costo cuando la escalada es incontenible?.
Las circunstancias conducen a probable ingobernabilidad y no es una puntada del columnista sino opinión de la conferencia de gobernadores, la famosa Conago, tras reunirse sus integrantes con el secretario de Hacienda este lunes, excepto Macera de la CDMX quien condicionó su asistencia a la presencia de Peña Nieto.
Mientras tanto la sociedad civil actúa con responsabilidad colocando al supremo gobierno en predicamento. Y ha de disculpar el señor presidente pero los mexicas ya no creen ni en el bendito después de escuchar incontables mentiras. Con responsabilidad digo, a pesar de provocaciones y amenazas de pagar con cárcel la indignación que le invade. Hay muchas razones para suponer que se trata de cargar sobre las mayorías la crisis derivada de tanta corrupción e impunidad oficial. Y es que el gobierno no renuncia a nada, ni siquiera al avión presidencial de 7 mil millones de pesos, mucho menos a los ostentosos sueldos de los miembros de gran burocracia que en algunos casos alcanzan medio millón de pesos mensuales.
El sacrificio entonces corresponde a la hodencia que desde el fondo de su desgracia sólo exige que los alimentos sustanciales a la sobrevivencia se mantengan a su alcance. Y parece que para el supremo gobierno es mucho pedir.
Quedamos en que el mentado acuerdo que llaman “para el fortalecimiento económico y protección de la economía familiar” es una simulación más y por lo mismo sin garantía de ser cumplido y si no, pa’l baile vamos.
¿Slim para presidente?
Habréis notado que especialmente en redes se ha desatado una sorprendente campaña para que el multimillonario Carlos Slim Helú se convierta en presidente de México. Sospechosa la intención porque es innegable que proviene de las fuerzas más obscuras y retrógradas de la derecha clerical y capitalista que suspiran por el retorno de la aristocracia al poder.
Uno de los argumentos es que “quiere mucho al país”. ¡Y cómo no si es aquí donde obtiene buena parte de su riqueza aprovechando sus relaciones políticas!. No olvidéis que Salinas de Gortari le entregó en bandeja de plata Telmex siendo éste uno de los tantos negocios de los que participa. Recién la opinión pública se enteró que también construirá el edificio del nuevo aeropuerto internacional de la CDMX. Imagine lo que ello significa.
Quienes ensalzan la figura de Slim olvidan que es un hombre de 77 años al que sólo le interesa seguir produciendo dinero y por lo tanto difícilmente estará dispuesto a invertir seis años en servir a la república sin sacar provecho personal.
En este sentido el columnista supone que más bien se trata de confundir a los mexicas confrontando a Slim con López Obrador después de que en tales afanes al sistema le falló “el bronco” Jaime Rodríguez y otros que se consideraban con los tamaños para competir con “el peje” en el 018.
Sucede que
Está claro que el cacicazgo de Gonzalo Hernández Flores en Trabajo Social de la UAT se extingue sin excusa ni pretexto. Es producto desde luego de los excesos aunque fundamentalmente hay que entender que el desarrollo de la máxima casa de estudios incluye la eliminación de cotos de poder incompatibles con los nuevos tiempos que vive la institución. Hay que insistir sin embargo, que sobreviven uno que otro “punto obscuro” que seguramente pronto tomarán el mismo rumbo.
Y hasta la próxima.