La frase, atribuida a Don Nemesio García Naranjo, viene a nuestra mente porque hoy en los Estados Unidos comienza lo impredecible, con la llegada al poder presidencial de Donald Trump. Impredecible en lo previsible de un político que viene de la libre empresa y cuyas posiciones alternantes conmueven al mundo y en especial a México, cuya dependencia del mercado norteamericano es total.
La historia de nuestras relaciones también implican las Invasiones Norteamericanas que nos han costado la gran pérdida de nuestro territorio y la imposición histórica de los gobiernos de los Estados Unidos.
Trump representa un caso de preocupación internacional pero nos toca a nosotros bailar con la más fea, porque el muro lo tendremos cerca y porque la amenaza de regresarnos a los indocumentados en un amasijo humano de todas las variedades creando en nuestras fronteras y en especial de la tamaulipeca un grave problema social en lo inmediato.
Impredecible, del temor y el miedo, en un sarcasmo de un político que no es ficción sino un poder real tras la nación más poderosa del mundo, lejos de Dios y cerca de Estados Unidos para bien o para mal.
Saludemos a lo impredecible que la pesadilla apenas comienza ahora.