Los amigos son los árboles que crecen en nosotros. Se camina juntos en las fértiles veredas de la existencia. Un amigo es un amigo en todos los momentos.
Los amigos no se ponen a prueba porque la amistad solo la mide el corazón. Víctor Hugo López ha sido un amigo de la vida y de las letras en estos largos cuarenta años.
Maestro de escuela, hijo de maestros, su vida ha entregado a la docencia. Es un amigo de los libros, amigo de la inteligencia.
Sus dos hijas, mis ahijadas son mexicanas egresadas de la Universidad Autónoma de Nuevo León, con Maestría en la Sorbona de París.
Hoy ciudadanas canadienses y alemanas laborando como maestras en el servicio exterior. Le dedico este poema a mi amigo del alma.
SI LA VIDA ES ASÍ
(Para Víctor Hugo López)
¿Dónde está la muerte?
Si hemos vivido el tiempo necesario
Para recorrer el territorio corporal
En los campos de emociones
Que da el amor de corazón y de cabeza
Con la misma pasión de pisar
En tierra viva como la cal y la arena
Del reloj a tiempo.
¿Dónde está la muerte si vivir
Es recorrer a tiempo lo justo y necesario?
La muerte no existe si la vida
Guarda la gratitud de la siembra
Que escala la memoria
En la corona de la luz.
De la tierra somos y en polvo
Convertimos las semillas de la siembra
Que vuelan como pájaros de colores
En la alborada de la existencia.
La vida es así porque la vida
Sigue en tus manos de amor
Que son pala, martillo y pico
De la siembra.
Así mi amigo Víctor Hugo
Derramaré mis lágrimas en tu tierra.