La historia comenzó a revelarse de la siguiente manera: Hace unos días, el Jefe de la Oficina Fiscal del gobierno del estado en Tampico, Luis Alonso Mejía, visitó a la alcaldesa porteña, Magdalena Peraza Guerra, en las oficinas de la Presidencia Municipal.
‘Loncho’, como es conocido el ex diputado local y federal, soltó ‘la bomba’, una noticia amarga, dura, casi letal: El Ayuntamiento de Tampico no había pagado durante el trienio anterior, en el periodo 2013-2016, el Impuesto Sobre Nómina al gobierno estatal.
El monto acumulado en tres años es un tremendo golpe en términos financieros para la actual administración, la que arrastra una serie de pasivos del pasado inmediato: la deuda asciende a 20 millones de pesos.
‘La maestra se veía, realmente, preocupada por conocer apenas la semana pasada este nuevo adeudo con el gobierno del estado’, comentó ayer a algunos reporteros el presidente de la Comisión de Transparencia del Cabildo de Tampico, José Antonio Heredia Niño, quien minutos antes, durante el punto de Informes de Comisiones de la sesión ordinaria edilicia, reveló esa deuda junto con diversas irregularidades registradas en el gobierno local anterior.
Ahí, en la Sala de Cabildo del Palacio Municipal, el regidor panista leyó su informe de comisión, el que denominó ‘Los pecados capitales de Gustavo
Torres’. Crítico e incisivo, el texto fue lapidario: denunció excesos y abusos. Algunos ya habían sido revelados por el edil, otros no.
Uno de ellos fue el uso de fondos federales. Toño Heredia afirmó que se utilizaron ‘hasta 27 millones de pesos para el pago de gasto corriente’ con recursos provenientes del Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social (FAIS), un fondo que tiene el objetivo de financiar obras y acciones en beneficio de sectores que sufren rezago social.
Embalado, el regidor enfatizó: ‘Este dinero no fue repuesto oportunamente y al término del periodo quedó un faltante de 6 millones de pesos. En la Tesorería pensaron que llegaría el dinero y no le llegó. Y esto es un delito muy grave, utilizar fondos federales para el gasto corriente’.
Después, reveló la deuda que no fue conocida por la actual administración municipal sino hasta hace unos días: ‘Evasión de impuesto de la nómina estatal. Todo patrón, toda empresa, todo gobierno, tiene la obligación de pagar el 2 por ciento de impuesto de nómina y la semana pasada nos enteramos que el municipio de Tampico no pagó al gobierno del estado el 2 por ciento y tenemos una deuda desconocida de 20 millones de pesos’.
De paso, subrayó un adeudo con la administración de la Expo Tampico. Resulta que el Día del Maestro, de 2015, se celebró a 3 mil profesores con una comida. Todos salieron contentos del festejo, pero… nadie pagó la cuenta. El monto: Un millón de pesos. ‘Dimos una fiesta y no pagamos’, dijo José Antonio Heredia Niño.
Tras dar a conocer diversos pagos de bienes y servicios, el presidente de la Comisión de Transparencia del Cabildo de Tampico exhortó a sus compañeros solicitar al Congreso del Estado la aplicación de una auditoría a las finanzas de la gestión local anterior.
‘La verdad, nos dejaron en mal estado, nos van a limitar para tener obras, para tener futuro’, expresó el regidor. Dos ediles se sumaron a su exhorto: Néstor Luna Ortiz, del Movimiento Ciudadano; y América Sandoval Morales, del PRD.
Y QUE ‘NOQUEAN’ AL REGIDOR SOTTIL
Todos creían que el regidor (¿priista?) Carlos Sottil Cicero era ‘mudo’, pero ayer habló… ¡¡¡Y le fue como en feria!!!
Resulta que se le ocurrió responder a Néstor Luna, quien, una vez más, exigió que se elabore y se presente el Plan Anual de Obras Públicas a fin de conocer, con transparencia, lo que la actual administración porteña quiere hacer.
En una actitud que sorprendió a todos, Sottil levantó la mano, pidió la palabra y dijo: ‘Compañero Néstor, el plan de obra comúnmente se presenta a finales de febrero, principios de marzo, no se puede presentar antes… tenemos que tener el tema financiero bien amarrado, saber hasta del último centavo con el que contamos para poder hacer el plan de obra’.
La respuesta de Néstor Luna, regidor del Movimiento Ciudadano, fue sarcástica, demoledora, el primer ‘izquierdazo’ antes de noquear a Sottil: ‘Compañero regidor tenía mucho tiempo que no lo veía porque usted no se presenta aquí en el Palacio Municipal, ni siquiera las tres horas que el Código Municipal para el Estado de Tamaulipas señala de manera muy puntual’.
Luego arremetió con un golpe que noqueó al regidor Sottil, el que nunca habla, el que nunca aparece por los pasillos del Palacio de la calle Colón: ‘Usted ignora por completo la ley. El Plan Anual de Obra Pública se realiza de la mano con la Ley de Ingresos, nosotros tenemos contemplado un ingreso de alrededor de mil 200 millones de pesos al año. Cuando guste lo ilustro con la legislación aplicada al caso’.
Tras ‘el 1-2’ recetado por Néstor Luna, el conservador Sottil ya no respondió, guardó silencio. Quedó ‘noqueado’.
ORTIZ LOPEZ SUSTITUYE A MAGDA
En la ‘movida’ y ‘calientita’ sesión de Cabildo que se realizó ayer en Tampico, la primera sorpresa fue la designación del regidor del Partido Verde José Luis Ortiz López como el edil que ocupó el lugar de la alcaldesa Magdalena Peraza Guerra, quien no pudo asistir porque viajó a Ciudad Victoria para abordar los problemas financieros que aquejan a su gestión.
La segunda sorpresa fue el desempeño de José Luis Ortiz: se manejó atento y respetuoso con las participaciones de los regidores más críticos, José Antonio Heredia, Néstor Luna y América Sandoval.
A diferencia de lo que sucedió en alguna ocasión con la regidora Silvia Guzmán que se ‘enganchó’ a las primeras de cambio con el regidor del Movimiento Ciudadano, el edil del Tucán se mostró diplomático y cuando tuvo que opinar sobre el exhorto para la realización de una auditoría a la pasada administración municipal usó un tono explicativo y sereno. Buen punto.
Y PARA CERRAR…
El principal pecado cometido por quien presidió la pasada administración municipal en Tampico fue confiar ciegamente en su ‘brother’, en su ‘hermano’: el tesorero.