* El autor es Premio Nacional
de Periodismo 2016.
Derivado de los últimos escándalos político-judiciales el supremo gobierno asegura que la lucha contra la impunidad va en serio. Sin embargo en el remoto y poco probable caso de que así fuera EPN ya se hubiera sacudido a la mayoría de sus funcionarios (si no es que a todos), por la sencilla razón de que han ido a contra flujo de los intereses nacionales.
Usted dirá que en algunos casos no bastaría cesarlos y está en lo cierto considerando la obligación de responder y aclarar las sospechas sobre su honorabilidad que incluye la increíble multiplicación de sus bienes a la N potencia. En este sentido muchos son los nombres y apelativos que desfilan por la memoria popular en espera de que el discurso oficial sea congruente con la realidad. Empezando por todas las dudas sobre la adquisición de la célebre “casa blanca” de las lomas de Chapultepec, así como la residencia de Malinalco.
Ya sabéis que en ambas situaciones aparece Juan Armando Hinojosa Cantú, contratista en gran escala, de poderosas relaciones políticas tanto en el Edomex como en Los Pinos. ¿Combatir la impunidad?…pa’ mi que hay que ir a los orígenes.
El asunto es que el régimen federal aprovecha las circunstancias para llevar agua a su partido. Es decir al PRI, en lo que parece ser una de las últimas cruzadas para rescatar algo de credibilidad y ni como negar que se trata de exprimir el abecedario tricolor contra sus adversarios, o mejor dicho, su adversario que a estas alturas del juego no es otro que Andrés Manuel López Obrador y su proyecto de reconstruir a México.
Es claro que la reacción de las autoridades es tardía lo cual significa que la sociedad civil difícilmente creerá. Y menos cuando a lo largo del sexenio el pueblo mexica ha sido testigo de tantísimos hechos que colocan en evidencia al poder.
Y deje que lo más grave se ubica en las promesas incumplidas y en las puñaladas contra la economía popular que han dejado en estado de shock a más de cien
millones de mexicas que ya no saben ni por donde se alza el porvenir.
Ahora de que el supremo gobierno es oportunista, eso-que-ni-que. Nada más diga, ¿a quién se le ocurre festinar las detenciones tanto de Yarrington como de
Javier Duarte cuando ni siquiera hay la seguridad de su extradición?. Al menos no con la prontitud deseada. Sobre el primero los gringos tienen prioridad y difícilmente regresará y del segundo no se sabe hasta dónde alcanza el manto protector como para apostarle al olvido. Hay que interpretar con seriedad la sonrisa perversa del ex gobernador veracruzano durante y después de su detención. Alguna razón tendrán MORENA, PRD y PAN para imaginar que algo turbio se observa en el horizonte.
En concreto.- Suponer que las detenciones señaladas sumarán votos al PRI es creer que la gente “es tonta de ahora” para aplaudir y apoyar un sistema en proceso de putrefacción, esto último como resultado precisamente de sus excesos en perjuicio de las mayorías… ni como ignorar lo que produce el tricolor.
El tamaulipeco deseado
Pueden ser varios los motivos por los cuales la entidad permanece en situación especial. Desde luego el económico determina el resto y al parecer es ahí
donde radica el problema con todo y que la inseguridad sigue siendo pesadilla de la que no podemos despertar.
La deuda rebasa los 20 mil millones de pesos y no es invento del escribidor sino información de quienes conocen a fondo el asunto, misma que el actual régimen tendrá que afrontar al margen de las responsabilidades que resulten a otras administraciones, si es que resultan si no, psss no.
Seguro que ello tiene relación con la discreción con que se maneja el proyecto de Plan Estatal de Desarrollo y la cautela mostrada por el congreso local como si “la representación popular” esperara algo para aportar lo correspondiente.
Ello significa un limitante porque no sabemos hasta donde podría mejorar las condiciones en que transcurre el estado.
Y además como que el arribo de Trump a la Casa Blanca ha condicionado los acuerdos inter fronterizos de colaboración. Esperemos que no sea por mucho tiempo y para beneficio de Tamaulipas y sus habitantes.
Pareciera que al estado no hay por dónde entrarle cuando el tricolor dejó todas las puertas clausuradas….pareciera y esa es la preocupación que inquieta desde hace casi siete meses.
Sucede que
¿Porqué durante la “Semana Santa” algunas autoridades municipales optaron por “el destrampe” fácil y el circo enajenante para la población en lugar de aprovechar las múltiples opciones culturales?…. que su conciencia se los demande porque es un atentado civil… (Ahí te hablan “san-marcazo”).
Hasta la próxima.