*El autor es Premio Nacional de Periodismo 2016
De acuerdo a una encuesta realizada por el gobierno federal filtrada a La Jornada, el Universal y algunos otros medios nacionales e internacionales, el futuro del PRI no puede ser más dramático. Y es que la susodicha investigación lo sitúa muy lejos de obtener la victoria en los comicios del próximo año. Es más punto com, quedaría por debajo de MORENA y el PAN, siempre y cuando no resulte por ahí un candidato independiente, entonces el tricolor tendría que irse hasta el cuarto lugar y sin esperanza de “repechaje”.
Desde luego es relativo al próximo presidente de México cuyas preferencias como sabéis se inclinan a favor de Andrés Manuel López Obrador, incluso la señalada encuesta lo ubica con casi el 31 por ciento, claro si ahora mismo se realizara la elección. En tanto el PAN aparece con el 23 por ciento y el PRI apenas con el 16 por ciento.
Además de AMLO se mencionan a posibles candidatos de los respectivos partidos. Para el tricolor se señalan a Osorio Chong, José Antonio Meade, Eruviel Ávila, Manlio Fabio Beltrones y hasta el ex rector de la UNAM José Narro y para el PAN Margarita Zavala, Rafael Moreno Valle y Ricardo Anaya.
En cuanto a la posibilidad de un candidato “independiente” se enumeran a Jaime Rodríguez, Jorge Castañeda y Emilio Icaza. En este caso el PRI quedaría relegado al cuarto sitio. Diga si no está como para ir preparando el sepelio del tricolor.
Todo lo anterior es la explicación más clara de los ataques y las provocaciones contra el líder de MORENA que llegan al colmo cuando el poder utiliza a personitas como Miguel Ángel Yunes (ahora gobernador panista de Veracruz), quien aprendió a navegar en las turbulentas y pestilentes aguas del PRI hasta que lo echaron “por indeseable”. La historia negra de Yunes incluye su incorporación al panismo triunfante en los tiempos de “la docena trágica”.
De manera que hasta en Los Pinos están convencidos de que para las elecciones del próximo año no existe otro triunfador que AMLO y encuestas hablan.
Usted dirá que ante esta evidencia al PRI, PAN y quizá hasta al PRD les conviene aliarse y decidir por un candidato común. Y tiene lógica, sin embargo el problema está en quién abanderaría esta causa que llamaremos “de la desesperación”, porque habrá más de tres que desearán encabezar la aventura.
En este sentido el escribidor considera muy difícil concretar dicha posibilidad tomando en cuenta la voracidad de las dirigencias partidistas las que pa’ empezar tendrían problemas para repartirse los beneficios materiales derivados del proceso electoral.
Y deje que en el remoto y poco probable caso de triunfar e integrar un gobierno de coalición el asunto se complicaría. Imagine la rebatinga por los cargos, respectivos presupuestos y algo más. ¡No’mbre que aquello se convertiría en una cena de negros!, dicho sea sin ganas de ofender.
Luis Enrique Arreola
Integrante de una dinastía ciudadana ejemplar, Luis Enrique Arreola Vidal lanza su espada en pos de la dirigencia estatal del PRI. Y lo hace con la energía, transparencia y entusiasmo de su juventud.
Sabe que enfrenta intereses y usos y costumbres que a lo largo de los años de alguna manera han perjudicado a su partido.
Luis Enrique aspira a la dirigencia tricolor en tiempos difíciles y seguramente muchos lo acompañarán cuando la confianza ya sólo radica en las nuevas generaciones de un partido que angustiosamente busca salvarse de las arenas movedizas que amenazan tragarlo y quizá desaparecerlo del espectro democrático.
Es un reto cuya valoración dependerá de la buena fe y disposición de la militancia…buena suerte, pues.
Sucede que
Según reciente estudio de Citibanamex, Tamaulipas es una de las entidades que están cayendo en situación de subdesarrollo debido entre otras cosas, a la disminución de la explotación petrolera y a la caída del precio del carburante. En términos técnicos nuestra entidad sufre desaceleración de la actividad económica que acrecienta la disparidad regional. (La Jornada. mayo tres).
Lo anterior no extraña a la paisanada aunque debiéramos agregar que la paulatina paralización de la entidad también obedece a la inseguridad (que no parece terminar), el desempleo que incluye los miles de despidos oficiales, la carencia de oportunidades, sobre todo para los jóvenes muchos de los cuales prefieren emigrar a donde reconozcan su preparación académica…y ni modo que sea invento.
Hasta la próxima.