Tengo un compadre que es Presidente de la Asociación Guanajuatense de jardineros que está muy contento porque por primera vez en la historia pudo exportar mano de obra y ciudad Victoria es el destino de esos talentosos artistas del podado de césped y regado de árboles.
Después de esa entrada un tanto socialera y que me llena mucho de orgullo, pasemos a lo que más me gusta, que es hablar del deporte y de Correcaminos.
El lunes fue presentado Ricardo Rayas como entrenador, leí en las notas algunas frases que me llamaron bastante la atención, de entrada que es un tipo franco y de eso se da uno cuenta hasta en su forma de decir las cosas, pues como decimos en el barrio “Le gusta hablar al chile”.
Rayas expuso que hay limpia total en el equipo, fue la despedida de todos esos nombres a los que estábamos acostumbrados a ver en la plantilla, desde jugadores emblemáticos como Nicolás Saucedo y Diego Olsina, hasta llegar al otro extremo, los que vinieron a cobrar 40 mil pesos mensuales sin hacer absolutamente nada como el “Pachu” Ávalos, el “Gato” Rea y Matías Vuoso.
Me llama la atención, que hasta Hugo Sánchez fue borrado y esto lo digo porque sé que el ahora técnico lo quería mantener en el equipo, pero el Presidente se impuso y logró aplicar esa famosa frase “De que se van, se van”.
Entiendo por esto, que no quieren a los jugadores que no son del club, es decir, los canteranos y jugadores como Daniel Vogel y Ricardo Chávez que son victorenses y fueron titulares en diferentes momentos con el equipo, se tienen que quedar.
Quiero suponer que Ricardo Rayas archivará esta disputa que significó su primer batalla perdida ante Rafael Flores para tantear el terreno que está pisando, y ojalá que en las próximas decisiones sea él con su experiencia dentro del fútbol, quien logre ganar este tipo de partidas.
Por poner un ejemplo, el ex técnico de Mineros, confesó que entre los elementos de la filial de Segunda División, había jugadores interesantes, aunque es consciente de la situación que enfrentará el equipo donde peleará por no descender, pero llegado el momento, un escenario probable es que algún chamaco victorense tenga mejores cualidades que alguno de los refuerzos anunciados antes de la contratación del entrenador, si su determinación es que un canterano ocupe el sitio que no le alcanzó al extranjero, imponga su ley y no lo orillen a ir en contra de esto, como le pasó a Jaime Ordiales, que era obligado a alinear a Hinestroza y Goularte.
Mientras tanto habrá que esperar al draft, donde por cierto me hizo recordar Rayas a un expresidente que dijo ir con “cartera abierta” a Cancún, ya que confesó “vamos con chingos de lana”, lo que a mí como aficionado la verdad hasta me emociona.
Bajo esta perspectiva creo que hay que estar muy atentos en el armado del equipo y también, por qué no, en la disputa de fuerzas entre un técnico de capacidad comprobada y un presidente ávido de protagonismo.
Nos leemos el próximo miércoles y aguas, porque tengo ojos en todos lados.
jimmygolden02@gmail.com