Las fuertes pugnas internas, además de las maniobras de siempre para resolver el proceso a la vieja usansa de la imposición desde arriba, que servirán de marco a la elección o mejor dicho designación del nuevo dirigente estatal del PRI de Tamaulipas auguran un cambio ríspido y controvertido.
Cuando el PAN sacó al tricolor del gobierno del Estado en el proceso electoral del 2016, los priistas tamaulipecos pensaron que la debacle obligaría al partido a tomar más en cuenta a las bases y a tratar de desactivar las discrepancias de los grupos a la hora de elegir candidatos y dirigentes pero da la impresión de que los jerarcas van a nombrar al sucesor de Rafael González Benavides mediante un dedazo disfrazado.
Quizá para demostrar que la idea del “Nuevo PRI” sólo fue un señuelo propagandístico engaña bobos, como lo demostraron el 4 de junio la elección
del nuevo gobernador del Estado de México y la chamaqueada que le dieron a los ilusos jerarcas, estrategas, operadores e ideólogos de Acción Nacional en Coahuila.
La incorporación a última hora de Oscar Luebbert Gutiérrez a la disputa de la presidencia del CDE ha hecho suponer que el reynosense cuenta con
el respaldo de los padrinos de peso que necesita para llegar al puesto, sin embargo, noticias provenientes de la capital del país indican, asimismo, que desde la Secretaría de Gobernación están moviendo las influencias para convencer al señor de los Pinos de que la mejor opción sería la diputada federal Mercedes del Carmen Guillén Vicente.
¿Sabrá, no obstante, el presidente nacional, Enrique Ochoa Reza, que Paloma “ganó” apretadamente la diputación local a la panista Marcela
Navarro Quintana y que, gracias a la ayuda de la alcaldesa Magdalena Peraza Guerra, habría llegado también de panzazo a la curul del palacio legislativo de San Lázaro, pero sobre todo que no es bien vista por los propios miembros del tricolor?
Yo pienso que no y que, en todo caso, si lo saben no les importa, impondrán a quien les dé la real y regalada gana. Están plenamente convencidos de que, así como imponen a los candidatos a puestos de elección popular sin tomar en cuenta el sentir de los ciudadanos les vale también el parecer de los priistas, saben que cualquiera que sea su decisión esta será acatada sumisamente.
Si la apreciación es correcta, el CEN dará el visto bueno al nuevo jerarca tamaulipeco que disponga, no con las simpatías de los militantes y electores, tampoco si es el más adecuado para guiar al partido político en las actuales circunstancias estatales, sino con las recomendaciones del más alto nivel.
El mejor ejemplo de cómo se resuelven las cosas en el Revolucionario Institucional es el propio Ochoa Reza, quien llegó al CEN sin haber desempeñado un cargo de elección popular ni directivo del partido que encabeza.
Lo que nadie entiende, por otra parte, es la alianza que tendrá MORENA con el Partido del Trabajo de cara a la sucesión presidencial del 2018.
¿Qué ganará Andrés Manuel López Obrador aliándose con el PT, un organismo político, creado, por cierto, por el gobierno del presidente Carlos Salinas de Gortari para sustituir al apéndice del PARM después de que este se le salió al gobierno del huacal para apoyar la candidatura presidencial de Cuauhtémoc Cárdenas, que es como un cero a la izquierda y que en los Estados, caso concreto de Tamaulipas, ha sido comparsa de los gobiernos priistas? Nada, absolutamente nada.
Los únicos que deben de estar de plácemes con la coalición anunciada por AMLO son los jerarcas petistas nacionales, estatales y municipales, pues gracias al Movimiento Regeneración Nacional el partido que manejan conservará el registro y seguirán viviendo a expensas de las aportaciones de los contribuyentes.
Para finalizar, si no tienen nada mejor que hacer este miércoles, les recomendamos que asistan a la conferencia sobre el filósofo y economista alemán Carlos Marx que sustentará esta tarde en la biblioteca municipal, localizada a la entrada del palacio, el maestro Jesús Sandoval Acuña a partir de las 17 horas, 5 de la tarde, les va a ser de gran utilidad para que se enteren a detalle qué es el comunismo, el socialismo científico y el materialismo histórico.
Sin olvidar, por supuesto, cuáles son las funciones que, desde la óptica marxista, tienen el orden jurídico, las fuerzas armadas, el sufragio, la democracia, la lucha de clases y el proletariado.
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