GUADALAJARA. Lo que inició como una broma llevó a Diego Polino a destacar como deportista en competencias internacionales. El atleta de alto rendimiento comenzó en la marcha, pero su inquietud lo llevó a practicar una singular disciplina de correr hacia atrás. Hoy es el único participante del Retrorunning en representar a México.
Cabañas, de 31 años de edad, estudió negocios internacionales. Sin embargo, desde niño fue un apasionado del deporte lo que le ha llevado a obtener triunfos internacionales.
“Yo empecé bromeando, empecé a voltearme por pocos minutos; algunos kilómetros al final de mis entrenamientos y así continué. De hecho soy el único mexicano que lo practica y me tocó ser el primer mexicano que asistí a ese mundial que se realizó en Alemania”, dijo en entrevista con Excélsior durante su entrenamiento en la pista de atletismo ubicada en el Parque Revolución.
Cuando radicó temporalmente en Inglaterra descubrió que esta actividad lleva dos décadas practicándose en Europa y que se promueve porque hay menos lesiones en rodilla, pie y espalda. Además, le ayuda a quemar más calorías, ya que la técnica requiere mayor consumo de oxígeno, ritmo cardíaco y concentración muscular.
“Te implica menos impacto para las articulaciones que un corredor normal. En este caso lo primero que cae es la punta, luego la planta y el talón. En un corredor normal lo primero que cae es el talón, a la larga comienzan los problemas de rodilla. Con esta modalidad hay menos lesiones, pero también otros beneficios, como te implica mayor concentración porque no vas viendo prácticamente, por lo que desarrollas una visión más periférica y desarrollas otros sentidos como el oído. Es como si fueras sintiendo el camino con los brazos y con los mismos pies. Vas como si fueras acariciando la pista. Cuando vas en la calle un pequeño bache lo percibes y reaccionas rápido para no caer”, explicó.
El corredor asegura mejora el nivel de equilibrio, obliga a una mejor postura en vértebras y disminuye la presión en nervios.
Diego Polino regresó hace unas semanas de Lanzarote, España donde participó en uno de los Ironman más exigentes, con el reto de 3.8 kilómetros de natación, 180 kilómetros en bicicleta y fue el único que terminó con el maratón de 42 kilómetros en retro running.
Ahora se prepara para correr en reversa el Ironman de Los Cabos el próximo mes de noviembre.
Su mejor marca hasta el momento en un medio maratón es de 1 hora 46 minutos y en maratón 4 horas y 2 minutos.
Hasta el momento no cuenta con patrocinadores, todas sus participaciones en competencias internacionales se han logrado “con coperachas” de familiares y amigos, además del trabajo de Diego.
Se sabe pionero en México y en Latinoamérica de esta disciplina de correr en reversa.
“La gente aquí realmente no lo conoce, me toca ser pionero por ese lado, hacer un poquito para que la gente lo conozca…sí, sí, también dicen qué payaso, voltéate y corre como todos. Inclusive me ha tocado en el maratón de Guadalajara y hasta porra tenía: ‘Somos más los que vamos para el frente’ y cosas así. Pero todo lo tomo positivamente y me divierto”.
Con informacion de Excelsior.