Desde hace tiempo, me da mucho gusto detenerme en un semáforo de la capital donde saludo a algunos victorenses que adoptaron ese sitio para trabajar y llevarle sustento a sus respectivas familias.
Ayer no fue la excepción, a pesar del calor que hacía, ellos estaban ahí, al pie del cañón, vendiendo naranjas, jugos y limpiando parabrisas de los autos que se detienen.
Los saludo desde que uno de ellos un buen día me reconoció y comenzó a platicarme su pasión hacia Correcaminos, misma que dijo él, tenía desde que era niño.
Otros días lo encuentro trabajando y portando una playera naranja de Correcaminos, siempre su comentario es sobre el equipo, a propósito de la jornada que pasó recientemente o de su necesidad de conseguir muchas monedas en el día para poder comprar su boleto y asistir el viernes al Estadio Marte R. Gómez.
Este jueves, su ánimo no era el de siempre, regularmente cuando me ve me recibe con una gran sonrisa y comienza a charlar de Correcaminos, pero ahora puso cara triste mientras limpiaba el vidrio.
Al preguntarle qué era lo que le pasaba me dijo, “Qué feos están los uniformes, ya nos quitaron el naranja, están bien zarras los nuevos uniformes”, el comentario no me sorprendió, sus palabras se sumaron a todas las que han inundado las redes sociales en las últimas horas, aunque hay aficionados que lo aplauden todo y recibieron con agrado las modificaciones al uniforme y escudo del equipo de casa, son muchísimos más los que demuestran inconformidad, indicando que esos cambios eran un atentado contra la historia e identidad del equipo.
Hay miles de comentarios al respecto en las redes sociales y grupos de amigos, incluso ya sucedió algo inédito, en Facebook se está convocando a una marcha con
el objetivo de que Correcaminos “Regrese a la normalidad”.
Todo ocurrió el miércoles por la noche, cuando en el Gimnasio de la Unidad Deportiva Siglo XXI se realizó el evento donde el club mostró a los aficionados el plantel, cuerpo técnico y uniformes que representarán al equipo de Victoria en los próximos dos torneos de la Liga de Ascenso.
Desde unos metros antes de ingresar a las instalaciones, se sentía algo diferente, había una gran convocatoria, decenas de autobuses arribaron al lugar, de ellos se bajaban familias enteras, la mayoría no portaban alguna playera o algo relativo al equipo, pero estaban ahí, su presencia sin duda llenó las gradas del Gimnasio, aunque a mitad del evento, comenzaron a salir.
No me crean a mí, porque yo no lo escuché ni lo vi, pero me comentaron que una señora se dirigía a algunos asistentes y les decía que ella se comprometía a que les cumplieran lo que se les prometió, no me consta, pero no lo dudo.
Un acierto en la presentación fue tener como maestra de ceremonias a la Miss México, la victorense Kristal Silva, quien recordó que su papá jugó en el equipo y por eso con más razón sentía los colores.
Ella fue acompañada por un joven de nombre Daniel a quien se refirió como un cantante y actor, la verdad aún no logro saber quién era, el muchacho traía mucha energía y conducía muy bien, pero me parece les faltó informarle detalles del equipo, pues gritó que “Este año sí se ascendería”, nadie le dijo que
administrativamente el equipo no puede hacerlo.
Lo mejor de todo, para mi gusto, fue la presencia de ex jugadores del equipo, a quienes se les rindió un homenaje, estaban Sansininea, Gerardo Guerra, “Kid” Herrera, Armando Pulido y mi querido profesor “Pánuco” Gómez, su presencia elevó el nivel de la ceremonia, ellos y el resto del equipo que ascendió en el 87 deben ser tratados como se merece, como lo máximo que tiene históricamente Correcaminos.
Quedé del otro lado del escenario, a la prensa de Victoria nos pusieron en el lugar más lejano y a los invitados de la prensa Nacional en primera fila, esos son los que si le importan a la Directiva, desde ahí pude ver con gusto la música de Kankel Guajardo, quien junto a su banda ganaron el concurso al generar una canción de apoyo, también se aplaudió a quien hizo la imagen de la nueva mascota.
Hasta ahí iba todo bien, lo lamentable comenzó a ocurrir al momento de presentar al plantel que jugará, mientras uno por uno y de manera muy veloz fueron
pasando al escenario, una gran cantidad de personas abandonaban el lugar, comenzaron a verse muchos huecos y aún faltaba lo principal, los nuevos uniformes.
Mediante un video se enseñaron, desde que aparecieron en pantalla hubo abucheos, luego aparecieron los jugadores portando la indumentaria, en el primer uniforme predomina el azul y existen unos leves vivos en naranja, increíblemente el segundo, el de visita ahora es verde con blanco, colores que no tienen nada que ver con el “Corre”, incluso ese como tercer atuendo se hubiera justificado más, mientras que el tercero es blanco con azul.
Hay nuevo emblema del equipo, es un circulo grande azul rodeado de otra circunferencia, la forma del Correcaminos también cambió.
Pareciera increíble esto, ¿Se imaginan ustedes si un día sale la directiva de Pumas a modificar su emblema y colores?, la afición se les iría encima y las críticas no se harían esperar, tengan por seguro que el equipo Universitario nunca hará eso, pues tiene identidad, aquí la poca que había la acaban de terminar.
En la vida los cambios siempre son buenos, en un equipo de fútbol puede ser que también, ahora literal es una nueva historia, todo nuevo, el actual Correcaminos se parece poco al de todos los años anteriores, ojalá que estos cambios sirvan para algo y consigan cosas importantes en la cancha, que al final
es lo que vale.
Si llegan los triunfos, los aficionados podrán celebrar y se olvidará un poco el malestar por las nuevas ideas, con un campeonato la gente va a comprar la playera aunque “Esté bien zarras” (Y sí), aunque no tenga el emblemático naranja.
Todo comienza de cero, justo en un año donde el equipo está en peligro de descender, hoy hay un nuevo Correcaminos, uno desconocido, uno que no tiene identidad y que depende sólo de él comenzar a tomarla, pero ahora con sus colores “Azul, verde y blanco”.
@daniriosmm