Tachún tachún, tachún, tachún-tachún-tachún, tachún tachún, tachún, tachún-tachún-tachún…
Que se oiga esa banda bonita que el prepreprecandidato anda de fiesta; no en una propia, sino en una ajena. El celebrado se llama Hernán Barrueta, pero el festejado es en realidad Benito Neme. La fiesta fue en Tabasco el sábado 8 de julio.
“Apenas puso el pie fuera de la camioneta Benito Neme, un mar de gente lo envolvió para saludarlo y tomarse fotos”, dice una nota (http://bit.ly/2uoSt58) sobre ese evento, visto por varios como un predestape.
En el marco de esa visita, Neme aclaró a sus paisanos que él está “abocado a solucionar el problema de las carreteras (…). Soy director de Capufe y estoy enfocado a eso, a mi trabajo”. (http://bit.ly/2uyf93j)
Mientras el director de Caminos y Puentes Federales se dejaba querer por sus paisanos, a 800 kilómetros de distancia un vecino denunciaba en las redes sociales mediante un video (http://bit.ly/2vs4TpR) que el libramiento de Cuernavaca, perteneciente a Capufe, hacía agua.
¿Nadie en Capufe puso atención a esa y a otras denuncias sobre una obra que forma parte de un importante ramal de las carreteras a cargo de Caminos y Puentes Federales?
Porque Benito Neme podrá alegar que la obra no se les ha entregado, que técnicamente el Paso Express hoy sigue en manos de la dupla constructora del libramiento, hoy bajo sospecha; sin embargo, cuando se trata de presumirla Neme no reparaba en tecnicismos. El 24 de abril, en entrevista con Paola Rojas, Neme hizo un balance del recién concluido periodo vacacional de Semana Santa y ahí señaló que el Paso Express “operó muy bien”, teniendo un tránsito muy ágil, además de que se arreglaron los “taludes” de la México-Acapulco, por lo cual “la gente pudo transitar de manera cómoda y segura”. (http://bit.ly/2v7RAey).
Y es que se desoyeron advertencias sobre fallas en el Paso Express del propio entorno de Capufe.
Un medio de comunicación de Morelos publicó el primero de mayo que Martín Curiel Gallegos, líder del sindicato de trabajadores de Caminos y Puentes Federales, consideraba “una vergüenza las condiciones en las que se entregó el Paso Express e hizo una advertencia que, funestamente, vería cumplida: dijo que “en breve con la llegada de las lluvias ‘nos daremos cuenta de qué tamaño es el problema con casas inundadas y más accidentes’”. (http://bit.ly/2tvffns)
Gerardo Ruiz Esparza, titular de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, dijo la semana pasada que nunca se enteró de las advertencias sobre el agua que provocó el socavón, ¿Neme dirá lo mismo? ¿Que no supo ni de llamados de auxilio en las redes sociales ni de oficios ni de lo que denunció el propio líder sindical de Capufe?
Para rematar el optimismo. En la ya referida entrevista a Ruiz Esparza en el programa de Loret el jueves pasado, Enrique Campos cuestionó:
Secretario, ¿con qué confianza podemos salir esta mañana a las carreteras del país?
–Bueno pues la confianza de los ingenieros mexicanos. Todo el que interviene en estas obras, en todas las carreteras del país, son ingenieros mexicanos (…). Y son ellos los que intervienen. Son ellos los que proyectan. Son ellos los que revisan. Son ellos los que construyen. Son ellos los que, en un momento dado, dan por validada la terminación de una obra. Entonces, creo que, con base en eso, podemos tener esa confianza…
Tres datos: Ruiz Esparza, secretario de Comunicaciones y Transportes, es abogado, el número dos de SCT es politólogo por la Iberoamericana, y el número uno de Capufe, Benito Neme Sastre… abogado también.
Tachún tachún, tachún, tachún-tachún-tachún, tachún tachún, tachún, tachún-tachún-tachún…
Twitter: @SalCamarena