A menos que ocurra un milagro, los consejeros del PRI en Tamaulipas, elegirán el próximo sábado a su nuevo dirigente entre: Óscar Luebbert Gutiérrez, Sergio Guajardo Maldonado y Alejandro Guevara Cobos. ¿Quién de los 3 podrá en una semana comprar más votos?
Así es mis queridos boes, si bien hoy la mayoría de los que analizan la vida pública de la Entidad aseguran que el ex alcalde de Reynosa en dos ocasiones tiene abrumadora mayoría de consejeros que le apoyan, también deben reconocer que los priistas le entienden a eso de darle la vuelta a las cosas y que las elecciones se ganan con lana, mucha lana, incluso las internas.
Aquí hay que anotar algunas cosas interesantes, el listado de consejeros del PRI de Tamaulipas hasta antes de que arrancara el proceso interno era una verdadera letrina de central camionera, hasta muertos estaban anotados.
Alguien que tiene acceso a esos documentos me dijo que había dos o tres números, que cada grupo traía su lista de consejeros y que al menos tres eran diferentes. El caso es que se dejó una sola lista y en esta hay entre 500 y 600 consejeros con derecho a voto el próximo sábado.
Y es ahí donde comienza una especie de “Los Juegos del Hambre”, porque entre los del PRI (gitanos) no se leen la mano y saben que con una buena lana se puede mover cualquier preferencia.
De entrada hay que apuntar que ni por asomo habría una citación de más de 550 consejeros, simplemente porque hay un buen montón de estos que ya no tienen interés en lo que ocurra con el PRI de Tamaulipas.
Ni modo que Eugenio Hernández Flores y su raza que se esconde, perdón cambio de residencia, al sur del país vaya a venir a votar al consejo, con la de sorpresas que luego da la PGR y su SEIDO.
O a poco creen que Egidio Torre Cantú y los que le rodearon en el gabinete van a hacer el viaje desde San Pedro para apoyar a Sergio Guajardo.
Hacía junto a quien me decía de la lista del consejo, que el próximo sábado podrían asistir unos 400 y cacho de miembros de ese órgano para emitir su voto, no más.
Sobre ese número es que Luebbert y Guajardo deben estar haciendo cuentas, incluso Guevara, de ahí podrían restar a los suyos que están plenamente convencidos de que votarán por ellos y entonces habrá que tratar de ‘convencer’ al mayor número de los que no son sus simpatizantes.
¿Cuánto costaría el voto de un consejero?, más de 10 mil pesos por superado para los personaje de menor envergadura política; los chiquitos, pero para los llamados gargantones esa cantidad no significaría nada y los aspirantes tendrían que ponerle más ceros al cheque o muchos más billetes al sobre amarillo.
Es decir; una elección como la del sábado podría bien superar los 40 ó 50 millones de pesos para quien quiera ganarla a como dé lugar. Créanmelo a los tres les cosquillean las manos e intentarán ganar a costa de lo que sea, a cualquier precio.
¿Pero si el sueldo de dirigente del PRI estatal es muy bajo, no se compararía con los 40 millones que constaría comprar la elección?, dirían los inocentes, pero la respuesta sería que lo que los que se aferran a ganar van por lo que implica el puesto que es ni más ni menos: la venta de candidaturas para las alcaldías y diputaciones e incluso rendirías, el manejo a veces discrecional de los millones de prerrogativas y la posibilidad de venderse bien caro con el poder en turno.
Por eso Luebbert aguanta que le hayan señalado que tiene relaciones peligrosas con los malos, por eso a Checo Guajardo le vale gorro que le digan títere de Egidio y a Guevara el intento de imposición desde el centro.
Los ‘memes’ en contra de los tres bien valen la pena, más ahora que no van a tener un jefe político estatal a quien darle cuantas.
Bajo esa premisa, hoy inicia la compra de votos de los consejeros priistas, ganará el que suelte más, el que logre más patrocinadores… tengo la impresión de que el PRI cuerudo otra vez se va a equivocar.
Chuchín en Higuerillas…
El fin de semana el alcalde de Matamoros Jesús De la Garza Díaz del Guante llegó a Higuerillas con todo y su gabinete a escuchar a los pobladores de ese lugar y de las islas vecinas que aprovecharon el Domingo Familiar organizado por la Secretaría de Desarrollo Social del municipio.
Fueron más de 600 personas, comerciantes y pescadores en su mayoría, quienes cara a cara con el presidente municipal formularon las peticiones: una plaza pública, la normalización del suministro de agua y la rehabilitación de algunas calles, entre otras.
A la convivencia el Alcalde llevó apoyos alimenticios, consultas médicas y otros que forman parte de los programas de asistencia social municipales.
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