CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- Pese a que en entidades como Tamaulipas los sistemas de pensiones se ajustaron entre 1995 y 2015, y obligaron a incrementar las edades de jubilación, esta tendencia fue leve en comparación de lo que podría ocurrir en los siguientes 20 años, cuando unos 650 mil habitantes (19 por ciento) de la entidad se podría convertir en adultos mayores y el bono demográfico estatal comience a colapsar.
Las tendencias demográficas de Tamaulipas indican que en los próximos 20 años la población mayor de 65 años se duplicará y el grupo de jóvenes entre 15 y 44 años disminuirá porcentualmente.
Los datos de los conteos de población muestran con claridad esa dinámica y el porqué la entidad es ya la segunda con más adultos mayores, pues además de la disminución en la fertilidad, Tamaulipas al mismo tiempo que tiene más muertes de personas en edad productiva debido a accidentes y agresiones, también dejó de ser un estado receptor de población y se convirtió en un estado expulsor, y la gran mayoría de los emigrantes son jóvenes o niños.
“En Tamaulipas se prevé que la población continúe aumentando en las décadas futuras, alcanzará en 2020 un volumen de 3,735,589 personas con una tasa de crecimiento de 0.98 por ciento anual; en 2030 llegará a 4,069,115 habitantes con un ritmo de crecimiento menor, 0.73 por ciento anual”, afirma el Consejo Nacional de Población.
Además muchos sistemas de pensiones como el de los burócratas estatales y los maestros tocarán fondo en los próximos años y obligarán nuevamente a incrementar las edades de jubilación.
Fitch Ratings al igual de Standard & Poor’s han señalado que los fondos de pensiones estatales como el de Tamaulipas, muestran una ausencia de lineamientos y regulación federal y no tienen supervisión de la Consar o Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro, además de que los cálculos actuariales de 2015 solamente cubren hasta 2025.
El Conapo concluye que la población de Tamaulipas muestra hoy profundas transformaciones que afectan su crecimiento y su estructura por edad y mientras disminuye la mortalidad infantil, aumenta la esperanza de vida al nacer, y envejece la población.
“Se prevé que la esperanza de vida de la población total sea de 76.5 años en 2020 y de 77.7 en 2030; las mujeres alcanzarán 78.9 años en 2020 y 79.9 en 2030, mientras que los hombres 74.3 años en 2020 y 75.5 años en 2030. Durante el periodo de la proyección se espera que la brecha entre hombres y mujeres disminuya de 6.1 a 4.4 año”, dice Conapo.
En los siguientes años Tamaulipas tendrá que buscar una alternativa para aumentar las edades de jubilación, aplicar la Ley Federal para Prevenir y Eliminar la Discriminación (lfped) para impedir que mayores de 60 años tropiecen con trabas de edad en los empleos y mejorar las campañas preventivas para evitar enfermedades crónico-degenerativas.
Las tendencias poblacionales en Tamaulipas son claras, de 1995 a 2015, el grupo de cero a 15 años de edad aumentó solamente el 1.52 por ciento, los mayores de 65 años crecieron en un 115 por ciento, mientras el total de la población se elevó 36 por ciento, de dos millones 527 mil habitantes a tres millones 441 mil, y a la fecha se estima que podrían ser tres millones 600 mil, pero no hay estimados de grupo de edad.
El grupo de edad que más creció, fue precisamente el de los adultos mayores, mientras los grupos quinquenales de jóvenes observan bajos crecimientos, desde un ocho por ciento para los de entre 15 y 19 años de edad hasta un máximo de 97 por ciento para los de 40 a 44 años, mientras los grupos de 45 a 64 años crecieron todos un promedio del 100 por ciento, es decir, se duplicaron.
Aunque la relación entre la población calificada de dependiente que, son adultos mayores y menores de 14 años no disminuyó con respecto a 1995, sino que incluso mejoró, los datos de edades de la población muestran que esta relación conocida como Bono Demográfico, está a punto de deteriorarse en forma acelerada.
El Consejo Nacional de Población (Conapo) define al Bono Demográfico como la relación demográfica que existe entre la población en edad de trabajar y la dependiente (niños y adultos mayores), la cual entre mayor sea a favor de los productivos, mayor será el potencial productivo de la economía.
Al comparar las encuestas de población de 1995 con el conteo llamado Encuesta Intercensal de 2015, se muestra que en 1995 el total de población presuntamente dependiente era el 39.81 por ciento del total, es decir, una relación de seis personas económicamente activas por cada 10 habitantes en la entidad.
Pese al envejecimiento de Tamaulipas, los altos porcentajes de crecimiento entre 1970 y 2000 impidieron que la relación población económicamente activa cayera y para 2015, sólo el 35 por ciento de la población de Tamaulipas estaba en los grupos de edad calificados de dependientes, lo que significa una relación de 6.5 personas en edad económicamente activa por cada 3.5 dependientes.
LOS JÓVENES
Grupo de Edad 1995 2015
15 – 19 años 275,684 298,121
20 – 24 años 274,901 285,067
25 – 29 años 229,796 257,221
30 – 34 años 195,075 257,165
35 – 39 años 168,254 257,657
40 – 44 años 126,389 249,460
TOTAL 1,270,099 1,604,691
PORCENTAJE 50.25% 46.62%
LOS NO TAN JÓVENES
Grupo de Edad 1995 2015
45 – 49 años 103,927 212,279
50 – 54 años 86,224 183,397
55 – 59 años 70,066 144,081
60 – 64 años 59,763 109,956
Total 319,980 649,713
Población 2,527,328 3,441,698
PORCENTAJE 12.66% 18.87%