Como todo proceso electoral, la victoria de Sergio Guajardo Maldonado, ahora nuevo presidente del PRI en Tamaulipas, es resultado de una conjugación de factores.
Ante la falta de argumentos, muchos analistas reiteran el mensaje ‘simplista’: una operación política alentada por los vientos del cambio provocó la derrota de Oscar Luebbert.
Sin embargo, la realidad política es multifactorial. Múltiples factores y variables fluyen e intervienen. Algunos tienen mayor peso e influencia que otros, pero determinan, en su interacción, el resultado final.
Un ejemplo: ¿Qué hubiera sucedido si José Murat, delegado especial del CEN del PRI en Tamaulipas, hubiera decidido, al más puro estilo priista, imponer ‘la candidatura de unidad’ en alguna de las reuniones que sostuvo con los aspirantes a la dirigencia estatal tricolor?
Pero eso no sucedió porque intervinieron factores y variables que contribuyeron a modificar la tradicional ‘cultura priista’ de la imposición, ‘la línea’ y ‘el dedazo’.
Un caso concreto: Marco Bernal, ex senador y ex diputado federal, conversó durante esos días con José Murat, su amigo. En esa charla que tuvo como tema central el proceso interno priista tamaulipeco, el matamorense planteó la necesidad de que el partido viviera una elección para definir a su nuevo presidente. Los argumentos eran más que válidos y convincentes.
El proceso electoral interno no solamente sería la forma de estimular la vida democrática en tiempos en que el partido no depende de las decisiones de la figura del ‘primer priista del estado’, sino que podría aprender a resolver sus diferencias mediante la libre competencia y el voto en las urnas.
En ese contexto, la realización de la asamblea del Consejo Político Estatal del PRI rompió el tradicional esquema del ‘dedazo’ (solicitado de manera reiterada al interior del priismo por quienes ya quedaron rebasados por los nuevos tiempos dictados por la transición, la alternancia y la democracia).
Durante el periodo proselitista, Oscar Luebbert también cometió errores, equivocaciones que lo llevaron a perder votos que ya tenía seguros. El peor error fue polarizar la contienda. En un spot lanzado al final de la carrera llegó a utilizar frases como ‘traición al partido’ a través de ‘la compra del voto’, calificaciones que lastimaron a consejeros que reflexionaron su sufragio final.
Otro error del equipo de Luebbert: Minimizar la figura de Sergio Guajardo. Cierto, el cenecista no ha sido alcalde, ni diputado federal, ni senador, pero con un activismo constante y con la promesa de construir un proyecto ganador en la elección constitucional de 2018 sumó liderazgos y grupos de apoyo.
¿Egidio Torre estuvo detrás del triunfo de Sergio Guajardo? Fue uno de los factores. Cuenta con alrededor de 30 consejeros estatales, a quienes, efectivamente, les pidió votar por el ex delegado federal de la Sedatu. Pero tal vez fue mayor la intervención de Oscar Almaraz Smer, alcalde de Ciudad Victoria, a favor de la causa de Sergio Guajardo, y eso casi no se menciona.
Edgar Melhem, quien hoy aparecerá junto al nuevo presidente estatal del PRI en su primera rueda de prensa, fue otro de los principales promotores del proyecto del cenecista. Casi todos los diputados federales, con excepción de dos, votaron por la causa del victorense.
Otros que se la jugaron con Guajardo: Ramón Garza Barrios, Lupita Flores, Pepe Benítez, Alfredo González, Eugenio Benavides, Héctor Canales, Tino Sáenz, Griselda Carrillo, Ernesto Gutiérrez, Francisco Bolado Laurents.
Los retos del nuevo dirigente del PRI de Tamaulipas pasan por la elección de 2018: seleccionar, sobre todo, candidatos competitivos a las presidencias municipales, respaldados con planillas a síndicos y regidores que capten simpatías y votos.
Por supuesto, la nueva dirigencia tendrá voz en la conformación de las listas de los aspirantes a las nueve diputaciones federales, así como para los prospectos al Senado, si bien estos se decidirán en buena medida en la Ciudad de México.
Antes de eso, uno de los retos de Sergio Guajardo será darle movimiento al PRI en el estado. Durante un año estuvo inmóvil, inactivo, prácticamente de luto. Llegó el tiempo de que ponga en activo al partido tricolor.
Y PARA CERRAR…
Anoche se realizó el Consejo Estatal del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) y se definieron las ternas de los aspirantes a senadores, diputados federales y presidentes municipales.
Para el Senado, fueron propuestos Enrique Torres Mendoza, Américo Villarreal Anaya y Jaime Moreno.
Todavía falta si el Comité Nacional de Elecciones, después del 3 de septiembre, mete uno o dos nuevos aspirantes, a fin de que compitan en las encuestas.