MÉXICO. Millones de mosquitos Aedes aegypti, especie que puede ser portadora de los virus del dengue, el zika o el chikungunya, fueron liberados este 29 de agosto en Rio de Janeiro, Brasil. Pero esto no es lo que parece.
Cada uno de estos insectos fue criado por la fundación de investigaciones médicas Fiocruz y fue inoculado con una bacteria natural llamada Wolbachia, común en especies como las mariposas, las libélulas o las arañas, ya que parece reducir el contagio de estas tres enfermedades.
La actividad en Brasil forma parte de un programa avalado por las autoridades locales que nació a finales de 2016 en Australia. Desde entonces, se comenzó la reproducción a gran escala en un proceso que actualmente permite alcanzar los 1,6 millones de mosquitos por semana y que espera llegar pronto a 3 millones.
El objetivo de la liberación de estos animales es que se reproduzcan en su hábitat natural y, así, empiecen a transmitir la bacteria a las próximas generaciones. Los científicos esperan, de este modo, eliminar la posibilidad de nuevas epidemias.
“Descubrimos que cuando al organismo de un mosquito Aedes aegypti se le introduce la Wolbachia, se reduce su capacidad de transmitir virus como el dengue, zika y chikungunya”, explicó Luciano Moreira, responsable del proyecto en Fiocruz. “La idea es que, estando en el campo, pasen esa Wolbachia y, con eso, se reduzca la transmisión”.
El programa comenzó con pruebas piloto en 2014. Posteriormente, la fundación empezó a lanzar mosquitos en Niteroi (afueras de Rio) y, este agosto, reforzó su plan en Ilha do Governador, al norte de Rio, con la idea de seguir en otras áreas de la zona norte y sur de la ciudad hasta finales de 2018.
Fiocruz aclaró que los insectos no implican riesgos para la salud de las personas ni para el medioambiente. El mismo programa, liderado por la Universidad australiana de Monash, ya funciona en Queensland (Australia), Medellín (Colombia), Puducherry (India), Yogyakarta (Indonesia) y Nha Trang (Vietnam).
Con información de Tec Review.