El candidato único a Rector de la UAT, José Andrés Suárez Fernández, ha establecido como una de las divisas centrales de su programa de trabajo un compromiso que no únicamente forma parte de los anhelos prioritarios de la comunidad de la Máxima Casa de Estudios de Tamaulipas sino de toda la sociedad: hacer realidad las exigencias en materia de transparencia y rendición de cuentas.
Dos reclamos que fueron desoídos por la mayoría de sus antecesores en el cargo, especialmente de los de la segunda mitad de la década de 1970 y subsecuentes.
Sin embargo, la promesa del virtual sucesor de Enrique Etienne Pérez del Río va un poco más allá, que la rendición de cuentas y la transparencia en el funcionamiento del Alma Mater, materias que dijo que serán temas estratégicos de su plan de actividades, que exige la ley a todas aquellas entidades que manejan dinero de los contribuyentes, se extenderán también al renglón académico, uno de los puntos flacos o talón de Aquiles de la Universidad.
En el recorrido que realiza por las 24 facultades, unidades académicas y escuelas que conforman a la institución de educación superior del Estado ha reiterado la misma responsabilidad. Lo hizo en los encuentros que sostuvo con los estudiantes y catedráticos de Nuevo Laredo y otras poblaciones de la frontera, así como en el sólido sur, en los que el Maestro ha tenido una recepción positiva.
En Tampico, la reacción predominante de los que acudieron a escucharlo fue la esperanza, el deseo de que la Universidad vuelva a ser lo que en los inicios, una unidad académica de vanguardia y centro del debate de las ideas y de las corrientes del pensamiento universal que le corresponde, no una tribuna al servicio del gobierno en turno, mucho menos de algún partido político, como ha sucedido, desafortunadamente, en el pasado.
En las visitas y diálogo con el estudiantado, Suárez Fernández expone el programa de labores que pondrá en práctica tan pronto asuma las riendas de la rectoría y al mismo tiempo escucha las iniciativas, demandas, criticas, sugerencias y opiniones de los integrantes de la comunidad tanto estudiantil como de los docentes e investigadores.
Los universitarios esperan que la palabra empeñada por el profesionista no vaya a quedar como la de la mayoría de los funcionarios públicos, en una oferta fallida.
Ya que hablamos de rendición de cuentas, como lo hiciera la maestra Magdalena Peraza Guerra el lunes, este miércoles la presidente municipal de Altamira, Alma Laura Amparan Cruz, rendirá su primer informe de gobierno para hacer saber a los ciudadanos de la población a la que representa el estado que guarda la administración en los primeros once meses de trabajo.
El acto tendrá lugar a partir de las 18 horas, 6 de la tarde, en las instalaciones de la Expo Internacional de Ganado Cebú, habilitado como recinto oficial, durante una sesión solemne y extraordinaria de cabildo al que han sido convocados representantes de los diferentes sectores de la sociedad e invitados especiales que darán fe y testimonio del reporte edilicio.
En asuntos de otra índole, el titular de Jóvenes Tamaulipas, antes ITJUVE, el tampiqueño Edmundo Marón Manzur está haciendo esfuerzos para cumplir con la misión casi imposible que le ha asignado el gobierno del Estado, cambiar la imagen de la dependencia que a lo largo de los gobiernos del PRI servía sólo para arropar, como acarreados, a los actos políticos y aparentar la apertura de espacios a la participación del sector en las
funciones del quehacer público.
Y decimos que es casi imposible porque sin presupuesto, factor fundamental, aunque no el único, que se necesita para realizar exitosamente toda encomienda, resultará complicadísimo al funcionario entregar cuentas positivas en los programas de desarrollo social, cuidado del medio ambiente, educación, salud, concursos y festivales que conforman, entre otras, las tareas básicas de la institución gubernamental que encabeza.
El joven tiene mucho entusiasmo, lamentablemente, se requiere mucho más que eso para convertir a la juventud tamaulipeca en un verdadero
motor de desarrollo y progreso y evitar que vaya a suceder lo que le ocurrió con ella en los regímenes del Revolucionario Institucional, terminar como un señuelo para que los votantes de 18 a 30 años acudan a emitir el sufragio, ahora a favor de los candidatos de Acción Nacional, en las jornadas electorales.
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