JAUMAVE, Tamaulipas.- En Jaumave los campesinos, han realizado una tarea que parece milagrosa, al transformar 300 hectáreas de desierto en un bosque lleno de pinos.
El ejido Ávila y Urbina del municipio de Jaumave, ha sido el escenario de éste rescate dónde se ha desafiado al daño causado por actividades agrícolas y el sobrepastoreo para aterrizar ésta historia de éxito.
Onésimo Rocha Ugalde, Jefe del departamento de restauración de la Comisión Nacional Forestal (CONAFOR), dijo que esta transformación es parte de un proyecto de rescate a las áreas degradadas por la explotación de la tierra.
“En esta comunidad, dijo, se trabajó en acciones para restaurar con actividades de protección, conservación de suelos y reforestación con las especies Pinus greggi y Pinus cembroides, que se distribuyen en la región y que a la fecha registran un buen desarrollo y crecimiento”.
El ejido Ávila y Urbina, está ubicado en lo alto de la cadena montañosa de la Sierra Madre Oriental, dentro de la micro cuenca “Arroyo la Tinaja”, en el municipio de Jaumave.
Detalló que,”Las actividades de restauración y reforestación arrancaron en 20 de mayo de 2005, y a la fecha se tiene un importante avance en la recuperación del suelo, lo cual es de gran beneficio para más de 500 habitantes de la zona”.
Explicó que aquí se realizaron acciones de conservación y restauración forestal, lo que ha contribuido a la cobertura vegetal en el estrato arbóreo, arbustivo y herbáceo, lo que beneficia el control de erosión laminar del sitio, incrementa la infiltración de agua y mejora el hábitat para la fauna silvestre.
Rocha Ugalde, dijo que entre los resultados visibles luego que de 330 hectáreas que se reforestaron hace 12 años, se obtuvo una sobrevivencia mayor al 70 por ciento de los árboles plantados.
“En este lugar también se impuso un cerco combinado a base de alambre de púas y malla gallinera, para evitar la afectación de la reforestación por pastoreo, aves de corral y algunos otros problemas”.
Además se disminuyó la tasa de erosión hídrica con el diseño implementado al realizar la reforestación.
Explicó que este proyecto ha permitido que otros ejidos y particulares del altiplano tamaulipeco, repliquen algunas de las acciones realizadas en predios apoyados por el PRONAFOR.
Lo anterior ha dado lugar a la obtención de beneficios, así como la aceptación de dichas actividades por parte de la población, dando como resultado el incremento de la cobertura vegetal, y mejores condiciones de vida.