Tamaulipas.- Humilde “cerillito” murió en total abandono en la colonia Lázaro Cárdenas y hasta el paso de los días su cuerpo mutilado fue descubierto por sus vecinos.
El hombre de 65 años y que en vida respondía al nombre de Rogelio González Herrera, sufría de diferentes enfermedades y de acuerdo a técnicos forenses que llegaron al tejaban donde vivía en la calle Leyes de Reforma, tenía entre 5 y 7 días de haber fallecido.
Dentro del cuarto de madera y lámina se localizó el cuerpo recostado sobre la cama y al cual le faltaba el brazo derecho y la pierna izquierda, debido a que su perro de nombre “El Negro” se estuvo comiendo la carne descompuesta.
Vecinos del fallecido afirmaron que tenían tiempo de no verlo, pero que presumían estaba cubriendo sus turnos en Soriana Laguneta, donde prestaba su servicios como empacador de mandado de los conocidos como “cerillos”.
Como era un hombre reservado y que vivía solo, nadie indagó más sobre su ausencia, hasta que la mañana de este jueves una pestilencia invadió la calle Leyes de Reforma y provenía del cuarto de don Rogelio.
Cuando elementos de Protección Civil ingresaron al lugar el olor de la carne descompuesta los recibió, al igual que un perro negro que estaba encerrado en el lugar.
Al momento de hacer el levantamiento del cadáver se puntualizó que carecía de dos extremidades por lo que las autoridades presumen que sirvieron de alimento para la mascota del hoy occiso.