La irrupción de la tecnología en la vida de la humanidad es un hecho desde hace ya varias décadas. Desde su aparición nos hemos vuelto dependientes de ella, al grado de no poder apartarla de nuestra cotidianidad.
Y para citar unos ejemplos, destaco algunos inventos tecnológicos de los que somos totalmente dependientes:
La energía eléctrica se ha hecho tan vital para todos, que unos cuantos minutos sin esta corriente nos altera el humor. Cosa de pensar que exista una temperatura de más de 40 grados centígrados y que no haya energía eléctrica para el aire acondicionado parar valorar este servicio.
Luego, a finales del siglo XIX y principios del siglo XX, el automóvil vino a modificar la cotidianidad de los seres humanos que vivían en las áreas urbanas. Atrás fueron quedando las carretas impulsadas por animales para dar paso al poderoso Ford T.
A partir de su aparición ya nada fue igual. De igual manera, desde principios del siglo pasado, los hermanos Wright inventaron y desarrollaron propiamente el avión. Está nueva creación, revolucionó el sistema de transporte de grandes distancias.
Se acortaron los viajes intercontinentales dando paso al turismo y transporte de mercancías con suma rapidez.
Tanto la televisión, la telefonía y las telecomunicaciones han avanzado tanto, que hemos perdido la capacidad de asombro. Aunque el avance en la tecnología de guerra, también ha provocado fuertes enfrentamientos entre naciones y provocado grandes pérdidas humanas. Sin embargo, el desarrollo de la tecnología médica, ha traído grandes beneficios y logrado aumentar tanto la calidad como la extensión de la vida humana.
Y así, llegamos a la era actual donde la comunicación masiva ahora se centra en el texto por la vía telefónica. La famosa aplicación “whatsapp” se ha convertido en la alternativa para comunicarse de manera silenciosa, supuestamente privada y rápida. Y más allá, ahora con la alternativa de formar “grupos”, se integran por disciplina, afectividad, intereses, regiones, temporalidad y hasta por simple gusto.
Para aceptar este fenómeno de integración, requerimos aceptar y entender que a pesar de que muchos de los miembros no se conocen, se unen en función de un objetivo y entre más genuino sea, más unidad provoca. Es fácil saber la cohesión por la motivación que se da entre todos, insisto, a pesar de las distancias y de jamás haberse saludado.
Recientemente, la simpatía hacia el Secretario de Hacienda, Jorge Antonio Meade, ha provocado la creación de muchos “chats” a su favor.
Según se sabe, lo que empezó con un simple grupo de amigos de mucho tiempo, paulatinamente fue creciendo al grado de haber llegado al máximo permitido, que son 256 personas en cada chat y al agotarse la entrada a los ya constituidos, se provocó la creación de otros tantos. Otra alternativa fue que cada región hiciera el suyo propio para poder dar cabida a los simpatizantes del Dr. Meade.
Es claro que la idea surgió de uno de los personajes cercanos a Meade para sumar la mayor cantidad de gente a favor de su amigo. Al parecer, la iniciativa creció hasta llegar a miles en todo el territorio y sigue dando para más.
José Ramón Martel, quien ya fue diputado federal en 2 ocasiones, es quien abandera esta iniciativa a favor de Meade. Se entusiasma cuando sostiene que: “Las miles de personas que conforman los chats a favor del Dr. José Antonio Meade, están integrados por amigos, y amigos de amigos que simpatizan con él, sin menoscabo de ser multidisciplinario y con un amplio compromiso con la forma de pensar y ser del Secretario. Hay miles de mujeres, hombres y jóvenes entusiasmados que ya quieren que inicien los tiempos legales del proselitismos para salir a la calle”.
Dice que “desde temprano, la gente se automotiva y motiva a los demás en favor de Meade. Además se dan animo mientras se desean los buenos días y éxito en lo que emprendan”. Agrega diciendo que “es una verdadera sorpresa cómo se ha integrado voluntariamente empresarios de gran calado de varios estados que han solicitado ser parte de estos chats. Así mismo, se han sumado amas de casa, estudiantes, artistas, profesionistas, notarios públicos, sin faltar mucha gente que ya ha ocupado cargos relevantes en el sector público, en la Cámara de Diputados, federal y local, en el Senado y hasta ex gobernadores.
Martel sostiene que “este tipo de organización es inédita, original y muy alentadora para los objetivos de quienes están a favor de José Antonio Meade”. Acepta que la contienda por el 2018 será reñida, pero que este tipo de organizaciones que se han multiplicado con suma facilidad, bien pueden ser otro de los factores que posibiliten alcanzar la votación deseada y ganar la presidencia”.
Termina asegurando que “la gente que conforma “los chats de Meade” sueña con que un hombre honesto, capaz, con experiencia y amor a México, llegue a la Presidencia de la República. La gente sabe que es eficaz y sencilla. Eso ayuda mucho.
Son cualidades lo han hecho crecer y ganar las simpatías de todos. Por eso andan prendidos y entusiasmados”.
Mientras esperan el momento de la verdad, los dedos que se deslizan por los tableros digitales de los teléfonos celulares, enviando y reenviando mensajes de texto destacando las bondades y las noticias del Dr. José Antonio Meade.
Y vaya que la gente se suma…