Al tiempo que el PRI lanzaba la convocatoria para la selección de su candidato a la presidencia (algo así como la encuesta falsa de AMLO), los priístas del país leían señales encontradas y mientras unos festejaban, el que decidirá tuvo que salir a acabarles la fiesta.
Así es mis queridos boes, todo comenzó el miércoles, cuando el canciller Luis Videgaray y uno de los mencionados por los de la opinocracia nacional, lanzó tremendo cebollazo a José Antonio Meade, titular de Hacienda, al que casi pone en el pedestal del padre de la patria, lo que fue leído como un destape.
“Es el único mexicano, junto con Plutarco Elías Calles, en haber ocupado cuatro secretarías distintas en dos gobiernos diferentes y que hoy conduce con gran inteligencia, disciplina y, sobre todo, patriotismo y visión de Estado, la política macroeconómica de México”, dijo Videgaray en reunión con el cuerpo diplomático
“Bajo el liderazgo de José Antonio Meade, hoy México tiene rumbo y tiene claridad en las decisiones de la política económica. Para nadie es un secreto que tengo el privilegio de conocer al Secretario desde hace muchos años, y puedo ser testigo fiel, no solamente de su inteligencia notable, de su extraordinaria preparación y experiencia, pero sobre todo de sus valores, siendo el más importante de todos la integridad y el patriotismo”.
Y entonces los del PRI enloquecieron, porque parecía que se conformaba lo que la mayoría de los analistas han dicho por meses, porque parecía que la campaña de Televisa y ELUNIVERSAL y casi todos los otros medios nacionales trepados en el contrato había surtido efecto y habría candidato destapado en unas horas.
Fue entonces que el propio Enrique Peña Nieto llegó para acabar la fiesta, como reclamando su derecho a destapar al tapado, señalar al del dedazo pues y ya entrado en reclamos de sus ‘legítimos’ derechos hasta despistados les dijo a los adelantados.
“No se despisten: el PRI no elige a su candidato a partir de elogios o de aplausos entre los varios miembros que hay en sus filas”, dijo Peña antes durante una gira por La Paz, cuando acordó con los periodistas que le acompañan que le preguntarán por el destape de Meade.
“A ver, yo creo que andan bien despistados todos. Yo creo que el PRI no habrá de elegir a su candidato, seguro estoy, a partir de elogios o aplausos”.
Unas horas antes de hecho, creo que tras una fuerte regañada, lectura de cartilla y quien sabe si cachetadón al estilo Eduardo Yáñez, el propio Videgaray matizaba sus dichos, atajaba la ola de rumores que dejó correr por 24 horas y aclaró que no quiso decir lo que todos creyeron que dijo.
“Ayer tres secretarios impartieron conferencias en la Cancillería, y a los tres los presenté con calidez, gratitud y reconocimiento a su talento y trayectoria. No hay que confundir eso con otra cosa. Las decisiones políticas se tomarán donde deben tomarse”, escribió en su cuenta de Twitter.
¿Cómo tenemos que leer estos tres momentos ocurridos en 24 horas entre miércoles y jueves en el PRI?, seguro que habrá lecturas de muchos tipos, la mayoría dependiendo del corazón de quien las manifieste, pero en lo personal, desde fuera, creo que flaco favor le hicieron al miltipromovido Meade, porque el mismo día lo suben y lo bajan.
Es decir creo que en toda esa confusión en la que Videgaray y Peña Nieto metieron a los del PRI el más perjudicado es el Secretario de Hacienda.
Porque cuando Peña Nieto llama despistados a los que ya lo daban como candidato, da a entender que por ahí no va la jugada, a menos que luego quiera ser él al que los despistados de ayer le apliquen el calificativo.
Pero además, porque cuando Peña dice que no van a elegir al candidato por los aplausos, también desmiente, minimiza las expresiones de muchos actores del PRI que se han manifestado entre líneas o textualmente en favor de Meade.
De cualquier forma, creo que lo de la subida y bajada de Meade ya le hizo daño y cuando sea ungido, si es que lo es, el nombramiento como abanderado dejará un sabor agridulce en el propio aspirante. Entre tanto, los que saben insisten en que Miguel Ángel Osorio Chong está listo para ser el candidato. Veremos y analizaremos.
Más como Cabeza: Pemex
Hablando de twitazos aquí dejo la copia del que José Antonio González, titular de Pemex en el país publicó luego de reunirse con el Gobernador Francisco Javier García Cabeza de Vaca: “Agradezco al gobernador @fgcabezadevaca la amplia disposición de su gobierno para avanzar en la implementación de la estrategia conjunta de combate al robo de combustibles en la entidad”
En la gira en la que se firmó la entrega de las viejas instalaciones de Pemex en Reynosa para convertirlas en un gran parque, el funcionario habría comentado que en una de las reuniones alguien de su equipo dijo que ojalá hubiera más gobernadores como Cabeza de Vaca en el país. Es evidente la buena relación y el trabajo sin colores partidistas de por medio.
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