CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- Debido al incremento de agresiones de alumnos contra docentes, la sociedad estatal de maestros y padres de familia solicita a legisladores cambiar la ley y que los tutores de menores paguen por delitos de fuero común que cometan.
Diariamente un catedrático por sector educativo es agredido por alumnos, y contrario a ellos que los protegen Derechos Humanos y la Secretaría; el profesor queda en la indefensión, dijo Miguel Ángel Tovar Tapia, presidente de la Sociedad Estatal de Maestros y Padres de Familia.
“Cuando un maestro denuncia una agresión recibe críticas, donde le dicen que para eso estudió y le cuestionan si no tiene la capacidad para controlar al grupo”.
Las agresiones a maestros han sido principalmente de forma verbal, pero últimamente han pasado a lo físico, lo cual puede provocar un efecto dominó que impulse a otros alumnos a hacer lo mismo al ver que no se aplican sanciones mayores.
“Como maestros estamos amarrados de manos. Nadie protege al profesor de una agresión por parte de un alumno; la dirección jurídica sólo interviene para dar largas y la solución más recurrente es cambiar al maestro o alumno pero nunca se aplica una sanción o se busca cuidar al maestro”.
Por ello se envió a diputados la propuesta para aplicar sanciones a alumnos que incurran en una agresión o falta dentro de un plantel educativo viole alguna ley, o en su defecto que se castigue al padre o tutor, sin embargo los legisladores le han dado largas.
“La propuesta que hicimos es que se legisle para que estas acciones deriven en una responsabilidad civil o penal y sea pagada por el padre de familia”.
Un adolescente tendría una edad física, pero mentalmente algunos tienen mentalidad de 18 años, por lo que sus acciones los podrían llevar a la cárcel en caso de ser mayor de edad.
“Los maestros no sabemos cómo enfrentarlo, porque si actuamos de forma severa, los padres de familia se molestan y recurren a derechos humanos, por ello estamos indefensos o no podemos controlarlo”.