“Si quieres llegar rápido, camina solo. Si quieres llegar lejos…camina en grupo”. Proverbio árabe.
LO CLARO. Aún se encuentran saliendo del arrancadero. Y en los primeros cinco días de batalla por dar preferencia al gusto de los electores, ya empiezan a quedar en el rezago –tal como se presagiaba- los contendientes con poco músculo en su estructura partidista.
Incluso, los hay quienes han dado desafortunadas declaraciones; como en Tamaulipas el dirigente azul, que reconoce un flojo arranque y la virtual ventaja de los candidatos del PRI.
‘Admite’ su poderío en dos de los 8 distritos en disputa. Lo que le otorga a su partido, un escaso margen de 20 por ciento de aceptación.
Y eso que aún restan 55 días de combate…
LO CLAROSCURO. “El mejor consejo personal que podría dar, es que no levanten las manos…hasta haber cruzado la meta”.
El INE —como ya sabemos— es un organismo emanado precisamente de la ciudadanía. No se debe a entidad gubernamental alguna.
Y mantiene el mejor grado de credibilidad entre la población mexicana. Al punto que le otorgamos la facultad de ser quienes avalen nuestra identidad como mexicanos, por encima del acta de nacimiento y el pasaporte mexicano, con la tarjeta de identificación que tiene como finalidad: el voto.
Dice el ex representante del IFE, Luis Carlos Ugalde, que aún faltan muchos candados por imponer a los procesos. Como el ancestral acuerdo de los candidatos —a puestos municipales y gubernaturas, así lo declara— con contratistas de obra. La inyección de recursos subrepticios a las campañas, que serán devengadas con obras millonarias, ya en el ejercicio.
Los nuevos parámetros de auscultación a los candidatos, —como lo detalla el representante del INE en Tamaulipas, Arturo de León Loredo— lo impusieron los mismos partidos.
La vigilancia en los entornos de las casillas, evitando acarreos en transporte; los gastos disimulados que se generan el día de la votación; los proveedores en general —incluidos los de combustible— que deben ser parte de un padrón fiscalizado por el INE, son reglas que los implicados ‘sugirieron’ se impusieran como norma.
Lo cual, a luces claras nos demuestra que un paladín de la democracia, cambia de partido y pone en el acta las triquiñuelas que su ex partido hacía. Y viceversa.
El resultado de esto, determinará lo difícil que será en delante sacar dinero de la bolsa para apostar a campañas nada seguras. Ninguna.
El representante del organismo —De León— habla sobre la enorme responsabilidad de dar certidumbre a la población, que no será dentro de la institución donde se pretenda privilegiar ni impugnar a nadie.
La guerra sucia, está afuera. Dentro de los siete símbolos de igual número de partidos, que buscarán presentar actos y personajes fuera de la regularidad.
No será la mejor propuesta cívica-democrática la que se alce victoriosa. Será la que sobreviva al mar de impugnaciones y descalificaciones propias y ajenas.
Hoy el INE, será —todo indica— el actor principal de la contienda. Demostrará que las organizaciones en manos de ciudadanos, pueden prosperar, sin mancha de duda.
Y efectivamente, sería prudente tomar la recomendación… las manos se alzan al cruzar la meta. No antes.
COLOFÓN: Francisco Pérez Tejada; Mexicali PRI. Luis Servando Farías; Nvo. León, Partido Cruzada Ciudadana. Manuel Aguilar “El Kippy”; SLP PAN. Sabino Padilla; Michoacán PRI (lo tumbó su propio hermano, Rubén). ¡Lagrimita! (Guillermo Cienfuegos) independiente, Jalisco.
Son algunas de las joyas que se atrevieron a alzar las manos…antes de empezar a correr.
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