Cuando empezó lo que algunos priistas llaman la docena trágica; es decir los 12 años de gobiernos panistas, el dólar fluctuaba en los 9.40 pesos, hoy a tres años de que los tricolores recuperaron el poder la divisa verde cerró ayer a 17.47 pesos.
Así es mis queridos boes, el asunto es que la escalada alcista del dólar no parece que haya tocado el máximo histórico y se vaya a estacionar, lo que se prevé es que pronto andemos con el dólar al doble de lo que lo tomaron los panistas allá apenas terminado el año 2000.
Es cierto que los temas de la economía no siempre son domésticos, también lo es que durante el sexenio de Felipe Calderón se vivió la peor crisis mundial de que se tuviera memoria, la mayoría de los países en lugar de crecer se encogieron y sus monedas fueron hechas añicos por la volatilidad.
Aun con esos ingredientes en el sexenio de Calderón el dólar llegó a costar sólo 12.9 pesos, cuando él lo recibió en 10.9; es decir que en seis años del michoacano, la divisa norteamericana subió dos dólares.
Vicente Fox incluso mostró mejor manejo de los asuntos financieros, pues recibió el dólar en 9.40 y lo entregó al segundo gobierno federal panista en 10.95.
La depreciación del peso frente al dólar en ambos gobiernos fue de más o menos el 17 por ciento en cada uno, es decir, no hubo mayores sobresaltos en la economía, sobre todo en la fronteriza ampliamente dolarizada.
Pero esas cuentas no las puede hacer con la misma alegría la administración federal actual, que en el área económica lideran Luis Videgaray y Agustín Carstens, el primero Secretario de Hacienda y el segundo Gobernador del Banco de México.
Resulta que en los casi tres años de la administración de Peña Nieto el dólar ha pasado de los 12.9 pesos en que se los dejó Felipe Calderón hasta ayer a 17.47 pesos y contando…
La devaluación es ya del doble de lo que fue en las dos administraciones azules; hasta ayer superaba los 32 por ciento y apenas han transcurrido 2 años y 9 meses de que el PRI arrebató el poder al PAN luego de 12 años.
¿Hasta dónde va a llegar el dólar?, nadie lo sabe, lo que sí sabemos la mayoría es que las respuestas ante el debacle cambiario han sido las menos afortunadas.
Qué no es que el peso se devalúe, sino que el dólar se fortalece es una de esas respuestas que hasta un niño de kínder contestaría con una mentada.
Qué es positivo porque las remesas que mandan los paisanos mexicanos que cortan el césped y lavan platos en los Estados Unidos crece en pesos, como decirles que no manchen.
Recordemos que hace más de un año el propio Gobernador del Banco de México nos insistía ante la ya amenazante crisis del dólar que era pasajero, que no había porqué alarmarse, que el peso mexicano estaba muy fuerte y miren hasta dónde vamos en ese lapsus que nos prometieron.
Por lo pronto los lamentos y las mentadas por la caída del peso no sólo se escuchan al unísono en territorio mexicano, sino que en la frontera del lado americano ya lloran por la caída del 50 por ciento en las ventas que obviamente casi todas las hacían los paisanos de este lado.
Pero como las malas noticias nunca llegan solas, el precio del petróleo mexicano se fue en caída libre a 33.71 dólares por barril; es decir a los niveles del año 2008. En la jornada de ayer perdió más de 2.5 dólares por barril.
¿Y qué si yo no tengo petróleo, me escribió hace unos meses un lector?, le respondí lo obvio, que menos precio del petróleo significa menos recursos para el país, menos dinero para obras, para proyectos de infraestructura, para programas sociales, para avanzar pues.
Eso sí, los precios del petróleo no son un problema generado por la administración federal, los petroprecios obedecen a la oferta y la demanda mundial.
Lo que sí depende de las administraciones federales y en eso las panistas y las priistas han coincidido en ser ampliamente dependientes de los precios del crudo, sin generar los suficientes ingresos propios.
Eso sí, en esta administración la suerte no ha estado del lado de Peña Nieto en este tema, porque mientras él y los diputados habían presupuestado el petróleo a un precio por ahí de los 80 dólares por barril, ayer estaba a 33.71; es decir mucho menos de la mitad de lo que se esperaba recabar por esas ventas.
En fin, el panorama económico para el país no es para nada halagüeño, los nubarrones se ciernen sobre todas las actividades productivas a lo largo y ancho del territorio y las noticias de fuera llegan desalentadoras.
China nos va a arrastrar al precipicio con la caída de su crecimiento, nos va a atropellar la bola de nieve económica que está en camino, lo malo es que quienes deben alertarnos de hacernos a un lado siguen mintiendo, matizando, desviando la atención.
Una buena…
Muy buena diría, es que inició sin mayores contratiempos el ciclo escolar. Parece que las advertencias de paro en Tamaulipas quedaron en eso. Bien por la educación de los niños tamaulipecos. En el país el saldo en ese sentido también es positivo.
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