A primera vista, estas gominolas no son diferentes de las que vienen en los paquetes de Haribo o las que compras en la tienda de la esquina. Algunas están cubiertas de azúcar, otras tienen formas de animales y casi todas tienen colores variados.
¿Entonces qué es lo que hace estas gominolas diferentes a otras? Son vitaminas.
Las vitaminas de gominola son la última moda en llegar al mundo de salud de Estados Unidos. Es fácil adivinar por qué: se trata de vitaminas que tienen una apariencia atractiva y un sabor dulce. Son una alternativa para clientes que no soportan las vitaminas tradicionales por el sabor y el tamaño de la pastilla, por nombrar algunas razones.
Aunque originalmente desarrolladas para niños, ahora también existen vitaminas de gominola para adultos. Cubren varias necesidades. Puedes obtener tu dosis diaria de, por ejemplo, vitamina C, vitamina D, calcio o una combinación.
Ahora viene la pregunta del millón: ¿Cuál es la trampa? ¿Pueden unas gominolas realmente tener el mismo efecto que las vitaminas?
Sí, funcionan, más o menos
La respuesta corta es, sí, pero funcionan de un modo diferente que las pastillas de toda la vida. Aunque tengan el sabor y la apariencia de dulces, las vitaminas de gominola pueden proporcionarle al cuerpo algunos nutrientes esenciales. Todo esto tiene un precio que afecta a tu cartera y tu salud.
Primero tienes que considerar el coste. Según los nutricionistas, debido a que los productos no están regulados en algunos países, como Estados Unidos, a veces no tienen la misma cantidad de vitaminas que las pastillas. Por lo tanto, tendrías que consumir más gominolas, que suelen ser más caras con respecto al precio por pastilla, para obtener la misma cantidad de nutrientes.
Otra consecuencia que se tiene que tener en cuenta es el azúcar. Pueden tener entre uno y tres gramos de azúcar. Ojo, las vitaminas de gominola también contienen colorante de alimentos y conservantes.
La sobredosis, la parte amarga de las gominolas
Sin embargo, la mayor preocupación de los médicos no es el azúcar o los colorantes, sino la posibilidad de que te gusten demasiado estas vitaminas. Debido a su apariencia y sabor, muchas personas acaban olvidándose de que las gominolas no son un dulce, son medicamentos. Y del mismo modo que cuando tomas demasiado medicamento, pueden pasar cosas malas.
Esto se debe a que el cuerpo solo puede absorber una cierta cantidad de vitaminas diarias: las que necesita. El cuerpo trata con los excesos de diferentes maneras. Algunas vitaminas, tal como las vitaminas C, B y B-12, son solubles en agua y pueden ser expulsadas por la orina. Al otro lado, las vitaminas A, D, E y K son solubles en grasa. Por lo tanto, cualquier exceso es absorbido por el tejido adiposo, lo que da lugar a la toxicidad por vitaminas.
Con información de Gizmodo.