CANCÚN, Quintana Roo.- Horas antes de que fuera apedreado por una turba, la noche del viernes pasado, en una colonia popular de Cancún, Aleksei Makeev, de origen ruso, había insultado y golpeado a una mujer y a un niño, como solía hacerlo mediante grabaciones llenas de expresiones de odio, discriminación y racismo, que compartía en redes sociales.
Un par de sujetos le reclamaron, él entró a la casa y desde la azotea comenzó a insultarles también. Al cruce de agresiones verbales se fueron sumando los vecinos. Había seis patrullas, con 30 agentes, según lo narrado por su vecina Kena Huerta. Ninguno intervino y abandonaron el lugar.
Además de lanzarle piedras, algunos entraron al inmueble. El primero en ingresar fue Carlos Gutiérrez de 20 años, a quien Makeev apuñaló con el arma blanca de sus videos. Herido, el muchacho se retiró y se desangró justo frente a la casa de Kena.
Mientras Eduardo agonizaba en plena calle, Makeev saltaba a la azotea contigua y las piedras le llovían. El linchamiento era transmitido en tiempo real y sumaba a más curiosos. Según testimonios la policía tardó en regresar 40 minutos. El joven murió y Makeev está internado en el nuevo Hospital General de Cancún; está grave, pues presenta una lesión cerebral.
