¿Ha escuchado usted sobre el Principio de Peter?
En caso de no ser así, se lo expongo en este espacio, conforme a la definición de Laurence J. Peter, autor del libro en el cual se hace referencia a lo que casi se ha convertido en un postulado laboral.
Afirma en su obra el famoso pedagogo –fallecido en 1990– que las personas que realizan bien su trabajo son promocionadas en forma natural a puestos de mayor responsabilidad, a tal punto que al escalarlos continuamente llegan a una jerarquía en la cual no pueden cumplir su encomienda y ni siquiera son capaces de formular los objetivos de su labor. En ese momento, asegura en ese texto, alcanzan su nivel de incompetencia.
Tal vez se pregunta usted el motivo de poner sobre la mesa esa teoría. Si me permite, responderé con un caso específico de lo que por lo menos hasta ahora, parece ser un ejemplo de lo mencionado.
La doctora Gloria de Jesús Molina Gamboa es actualmente, como muchos saben, la titular de la Secretaría de Salud en Tamaulipas. Antes de ser designada en ese cargo, ocupó la Dirección del Seguro Popular también en el Estado, donde desempeñó una de las tareas más exitosas dentro de ese sector al alcanzar cifras que se recomiendan por sí solas, al afiliar a más de 360 mil personas a ese servicio gratuito, con lo cual rebasó el 90 por ciento de los objetivos fijados al iniciar esa labor. Su buen trabajo en ese terreno merece no sólo un reconocimiento sino un aplauso.
Sin embargo, hoy su desempeño como Secretaria de Salud ha sido hasta ahora algo cercano a un drama. Reclamos generalizados del personal médico y de enfermería, desabasto de insumos y sobre todo de medicamentos, inoperancia quirúrgica de hospitales, clínicas y centros de salud y abandono de trabajo de médicos especialistas debido a la suspensión de pagos por su labor, suman factores que mandan un claro mensaje: No hay eficiencia en el manejo de la dependencia.
¿Alcanzó a la doctora Molina el Principio de Peter?
Es complicado disipar esa duda porque son muchísimas las variables que se conjugan en las operaciones de un monstruo burocrático como el sector salud sea en el nivel estatal o federal, no siempre bajo el control del o de la titular, pero a la luz de los antecedentes cercanos, en donde Tamaulipas había ocupado por tres años consecutivos el primer lugar nacional en medicina preventiva y en el manejo de males epidémicos hasta convertirse en referencia de seguimiento en otros Estados, es evidente que aún en medio de ese escenario tan complicado sí es posible hacer un buen trabajo.
En lo personal, entrego todo mi respeto a la doctora Molina. Queda claro que es una brillante profesional y posee amplias capacidades para diversas responsabilidades. Lo demostró con largueza en el Seguro Popular y creo con firmeza que puede continuar prestando servicios de alto beneficio para la Entidad, objetivos que en general quedan claros en los compromisos del gobernador Francisco García Cabeza de Vaca tanto en el área de salud como en otras dependencias.
Pero hoy, con el mundo encima, un panorama oscuro le hace daño a ella y al Estado: Como Directora del Seguro Popular se llevó un luminoso “10”, pero como Secretaria, tal vez Laurence J. Peter le pondría en el mejor de los casos un grisáceo “6”. En otras palabras, pasaría “de panzazo”.
Y se lo aseguro: deseo fervientemente equivocarme en esta percepción y que todo esto sea una efímera contingencia…
La frase de hoy
“El problema es que pensamos demasiado en lo que pasó y en lo que pasará, cuando lo importante es lo que está pasando…”
Sin autor/”Frases de la Vida”
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