Aaron Carter, de 29 años, ha vivido este fin de semana en la pequeña población estadounidense de Cornelia, a unos 150 kilómetros de Atlanta (Georgia), el episodio con el que ninguna celebridad quiere enfrentarse a lo largo de su trayectoria profesional: ser detenido ebrio y en posesión de drogas. El cantante de hip hop, antaño una estrella juvenil y muy conocido por ser el hermano pequeño de Nick Carter, miembro de los Backstreet Boys, ya ha pedido disculpas a sus fans.
A través de un comunicado, el artista ha alegado que tenía receta para consumir marihuana con uso medicinal y que la utiliza para aliviar sus problemas de ansiedad. La imagen de su ficha policial —ojeroso, despeinado y con cara de circunstancias— ha saltado rápidamente a los medios de comunicación. Según su versión de la detención, los policías le agredieron y un vídeo del momento demuestra que no se encontraba en un vehículo en movimiento.
Carter fue arrestado junto a su novia Madison Parker el sábado. Ambos están acusados de tenencia de drogas por llevar una onza (unos 28 gramos) de marihuana. El cantante quedó en libertad el domingo, pero su detención impidió que actuara en Kansas City, algo por lo que se excusó a través de Twitter alegando que había tenido un problema de “transporte”.
Tras pasar por este trance, Aaron Carter se ha mostrado molesto con su hermano por lanzar un tuit ofreciéndole ayuda. “Si mi propia sangre se preocupa por mi bienestar, ¿por qué no me llama directamente y tiene una conversación, en lugar de hacerme esto a través un foro público?”, se ha preguntado en el comunicado, en el que acusa a su hermano mayor de utilizarle para hacer relaciones públicas y “patearle” cuando está abajo.
Con información de El País.