Quienes tienen y mantienen un puesto comercial, dígase de la categoría que sea, grande o pequeño, se quejan de la poca venta que hay pues la gente acude a éstos pero ya no hay mucha venta y la razón que dan es que no hay dinero pero la verdad es que a donde quiera que vayan se encuentran con los altos costos que tienen los artículos, razón por la cual un buen número de comercios principian a cerrar sus puertas al público ante la falta de clientes y cuando acuden a surtir la despensa sólo adquieren lo indispensable del día.
Las tiendas grandes se están comiendo a las pequeñas en la creencia de que venden más barato.
Pero no es así, lo cierto es que el dinero cada vez rinde menos y esta falta de capital sólo está conduciendo al país a una crisis mayor.
Razón por la cual digo y sostengo que la política económica implantada por el Presidente Peña Nieto no está funcionando bien y se hace necesario una revisión a fondo a fin de enderezar el mercado y darle oportunidad a la familia de adquirir más con un salario que apenas da para subsistir.
Los altos impuestos tienden a subir cada vez más no sólo los artículos básicos sino que también las gasolinas, el gas y los alimentos, en tanto esto se observa el causante sufre cada día al despertar y se pregunta ¿Qué vamos a hacer?
A todo esto agréguenle el regreso a clases que para los padres de familia representa un martirio la compra de libros, cuadernos, lápices, pasajes y el peso para que el hijo se compre un refresco, un lonche o de perdido un vaso con agua sin olvidar las cuotas escolares y el uniforme, qué también cuestan lo suyo.
En el pueblo de mis mayores ya no hay obras, el gobernador Francisco Cabeza de Vaca ni nos visita, los diputados estatal y federal desde que vinieron a Llera por el sufragio ya ni se paran ni para darnos un saludo y los servidores públicos en sus tres niveles de gobierno prefieren encerrarse en sus oficinas o se van a Ciudad Victoria o a la Ciudad de México en busca de un respaldo económico pero siempre regresan con las manos vacías.
Por lo tanto pregunto:
¿Qué nos está pasando?
Creo Señor Peña Nieto que su política económica no le está funcionando al país.
Hoy, con su perdón, pero estamos más fregados que antes.
Mire usted, lo he comentado en varias ocasiones, tuve la ocurrencia de recorrer la carretera Llera- Zaragoza y no les miento que observé un campo abandonado, casas abandonadas y parcelas cubiertas de monte, es más ya ni gente hay, eso sí para que negarlo pero los únicos espacios donde se mira gente y por cierto muy poca es en las paradas oficiales de los autobuses pero esto sólo por las mañanas, de ahí para adelante ni una alma.
Lo peor, las familias se están saliendo de la casa en busca de mejores horizontes y prueba de lo anterior es mi barrio donde ya son pocas familias las que viven pues la mayoría se salieron.
Unas van en busca del sueño adorado que representa el vecino país y otras en busca de mejores oportunidades dentro y fuera de Tamaulipas.
Algunas regresan, otras no.
Por lo tanto invito a los gobiernos federal y estatal para que revisen sus programas sociales antes de que el barco se hunda por completo. HASTA MAÑANA Y BUENA SUERTE.
