CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- Las oportunidades en el fútbol a veces llegan a muy temprana edad, a veces llegan muy tarde o a veces simplemente por cuestión del destino no aparece; unos también la desaprovechan y no la toman o no saben como hacerlo, mientras que otro número muy selecto, hace esa oportunidad en oro y le saca todo el provecho posible, pues es algo por lo que lo trabajaron.
Brandon Enrique Abundis Bolaños, es de ese número elegido, esos pocos jóvenes que tal vez les tardó un poco en llegar la oportunidad de salir de su zona de confort, pero la aprovechó al máximo y ahora da pasos agigantados y con trabajos para que llegue una nueva y mucho mejor oportunidad.
Nacido en Monterrey, Nuevo León, pero hecho desde muy pequeño en tierras cañeras; la ciudad de El Mante, ha sido su casa desde que apenas caminaba, pues sus papás cambiaron de domicilio; se formó en dicha ciudad como persona y jugador y después de muchos años de picar piedra, ahora en Cruz Azul busca hacerse de un nombre en un futuro.
Siempre humilde y centrado en lo que busca en su vida personal y profesional, Brandon no piensa en otra cosa más que triunfar en todos los aspectos ya sea fútbol y la vida.
Apenas hace medio año que se fue y rápido encontró cabida, ahora es uno de los referentes del equipo Sub-17 y uno de los más grandes prospectos de la Máquina, que si bien es un equipo que no se caracteriza por dar oportunidad a los jóvenes en muchas ocasiones, hay sus excepciones, y Brandon quiere ser una de ellas.
El ‘cañero’ platicó con Oé! donde habló de todo el proceso que ha pasado desde que fue amateur, además de lo que ha vivido ahora en la Ciudad de México, donde el cambio ha sido muy radical pero que seguirán con paso firme en busca de pronto llegar a su más grande sueño que es: debutar en Primera División.
El destino lo llevó al fútbol
Sin tener una familia completamente futbolera como en muchos casos, Brandon tal parece que el fútbol lo quería sí o sí en su camino, pues de la nada le nació ese amor al deporte que no se imaginaba le iba a dar muchas alegrías, frente al televisor veía como pateaban la pelota y así inició todo.
“Nadie de mi familia lo practicaba, así que se puede decir que nació de mi solo; yo veía el fútbol con mis padres y desde entonces me gustó y siempre decía que es lo que a mi me gustaba”, comentó.
El amateur lo enamoró
En El Mante no se puede contar con un equipo profesional de nivel pues no hay Ascenso Mx o Segunda División, pero el nivel está; Brandon salía con sus primos a los diferentes partidos de fútbol llanero donde en todos los lugares hay un gran nivel, cosa que lo impulsó a meterse a un equipo.
“Después de asistir a juegos y ver todo eso, me gustó más y me metí a un equipo; me primer equipo se llamó Colegio Froebel, Cachorros, Borders Melón y por último Casem donde tuve más proyección”, destacó.
La oportunidad tardó
Con el paso del tiempo, Brandon fue en evolución, creció mucho como futbolista y salió a diferentes eventos, eso lo llevó a asistir al Torneo Nacional de Cuarta División con Deportivo Mante, además de un torneo internacional de Tigres y Atlas.
“Son los que más recuerdo y donde viví una experiencia muy buena y que me ayudó a seguir adelante, y sobre todo me dio ánimos para seguir con los trabajos”, mencionó Abundis.
A pesar de destacar en todos esos torneos, los llamados de equipos de la Liga Mx aparecían, pero siempre le daban las gracias, “había hecho pruebas en Atlas, Monarcas y Tigres”.
Pero lejos de desanimarlo, las cosas mejoraron y sabía que pronto vendría el equipo indicado, “me llegó todo tarde, tuve la calma suficiente, confiaba en mí y sabía que pronto iba a estar en un equipo profesional y ahora que tengo la oportunidad la tengo que aprovechar”, detalló.
No fue fácil
Brandon recuerda que todo comenzó en unas visorías, las cuales se realizaron en El Mante, “José Luis Sánchez, mi profesor que me entrenaba organizó unas visorías allá con apoyo de Marcial Díaz, el visor de Cruz Azul, me vio y me dijo que si quería hacer pruebas y sin pensarlo me fui”, destacó Abundis.
Tomó sus maletas días después y con mucha ilusión, pero sobre todo con una sed de revancha, viajó a México donde estuvo alrededor de una semana, realizó dos filtros en La Noria, “después nos dijeron a los que fuimos que nos fuéramos a nuestras casas”, dijo.
El nerviosismo apareció, aunque él sabía que lo había dado todo y no iba a quedar en él, repentinamente le llegó un mensaje que le iba a cambiar por completo, “cheque el correo y me había llegado la notificación que ya era parte de las fuerzas básicas”, pronunció.
“Me sentí muy feliz por que todo el esfuerzo que hice tuvo su recompensa, me vine a México y rápido me puse a las órdenes”, agregó.
‘Batallé en adaptarme’
Para muchos el llegar no es lo difícil, sino el mantenerse, claro ejemplo de Brandon, quien acepta que las primeras semanas de pretemporada fueron muy pesadas y se le dificultó todo.
“Había mucha competencia y adaptarme a la ciudad, pero como fue pasando la pretemporada me acomodé, me gané la titularidad y el torneo jugué casi todos los juegos, además hice goles”, señaló.
Con cuatro goles en su cuenta en 15 partidos fue de lo mejor en ese tema del equipo Sub-17 de Cruz Azul, por lo que a pesar de ser un jugador nuevo y que apenas tenía poco en el club, decidieron darle la continuidad en la mencionada categoría.
“La experiencia que tomé fue buena y ya este torneo me siento mucho mejor”, dijo tras su inicio prometedor donde ha conseguido dos goles en tres encuentros que ha jugado en el Apertura 2017 donde “espero hacer más goles, un mejor torneo y que el equipo le vaya bien”.
Los mejores momentos
Durante su vida futbolera, Brandon ha pasado cosas muy bonitas y sobre todo ha conseguido amistades sinceras, pero en el tema de la cancha, una de las cosas que más recuerda y recordará fue su primer gol con Cruz Azul.
“Fue contra Veracruz, fue mi primero a nivel profesional, siempre recuerdo ese gol, una buena jugada que terminó con una barrida mía con la que metí el gol”, encuentro que ganaron 1-0, “tampoco olvidaré cuando debuté”.
Con metas claras
El delantero que se considera todo un tamaulipeco, asegura que no piensa en otra cosa más que triunfar, pues ha batallado tanto para conseguir esta oportunidad que sabe no volverá.
“Quiero destacar en fuerzas básicas aquí en Cruz Azul y si Dios quiere después debutar en el primer equipo y también otro objetivo que tengo en mente es
tener mi carrera profesional”, sostuvo. Asimismo dijo que su más grande sueño, “como todo futbolista, es jugar en Europa y la Selección Mexicana”.
Finalizó la entrevista con un mensaje para sus amigos y seres queridos, “les agradezco todo el apoyo, primeramente a mi familia y también al profesor José Luis Sánchez y Marcial Díaz, y a todo Mante que está al pendiente siempre”, cerró.