MÉXICO. De acuerdo al diario alemán Bild, los dueños de la mascota se fueron de vacaciones y para evitar que la tortuga se escapara, decidieron taladrar el caparazón e introducir un anillo unido a un cable para que no fuera muy lejos.
Arne Stenzel, de 50 años, y Ute Nack, de 48, fueron los que encontraron en terrible estado al animal. Ellos llamaron a los bomberos y a un refugio de animales, que, en compañía de un veterinario, lograron liberar a la tortuga.
La mascota fue trasladada a un hogar de animales maltratados y viene recuperándose de la dolorosa situación.
Max Schaurte, responsable del refugio, declara que «debe de haber sufrido un dolor terrible, porque el caparazón es como la piel humana». Los dueños de la tortuga ya han sido denunciados por maltrato animal.
Los dueños de la tortuga fueron denunciados por maltrato animal.
Con información de Wapa.
