MÉXICO.- Con el argumento de que son necesarios profesionales bien preparados que atiendan las necesidades de la sociedad, el diputado de Nueva Alianza, Ángel García Yáñez propuso una iniciativa que obligaría a los profesionistas a renovar su cédula cada seis, mediante un examen que acredite sus conocimientos.
La Secretaría de Educación Pública (SEP), a través de la Dirección General de Profesiones, integraría un padrón por especialidades de todos los profesionistas titulados y certificados que deberá actualizarse en forma anual y estará disponible para su consulta, a través de los medios electrónicos institucionales de la dependencia.
Para acreditar la certificación, los interesados presentarían un examen teórico-práctico, a fin de demostrar que tienen los conocimientos necesarios en la materia que trate la certificación que pretendan.
La evaluación se solicitaría en la institución de educación superior donde haya cursado sus últimos estudios o en otra de su elección, la cual expediría una constancia que contenga los resultados de la prueba correspondiente.
Quienes no acudan a la certificación referida estarán impedidos para seguir ejerciendo la carrera, pero mantendrán su derecho de acudir ante la SEP para solicitar una prórroga o término, con el fin de acreditar los estudios.
La iniciativa se encuentra publicada en la Gaceta Parlamentaria y fue remitida a la Comisión de Educación para su análisis.
García Yáñez mencionó que la sociedad requiere de profesionistas capacitados y especializados que brinden bienestar y satisfacción, sobre todo en carreras como Medicina, que implica diversas ramas y especialidades como: anestesiología, ginecobstetricia, odontología, oncología y enfermería, entre otras.
El diputado consideró que sin registro o certificación no hay legalidad; en síntesis, sin un control o supervisión de la autoridad, el ejercicio de la profesión se vuelve un escenario anárquico.
Apuntó que la ley, en sus términos vigentes, no toma en cuenta la superación periódica y actualización de los estudios del profesionista, por lo que esta iniciativa pretende atender dicha omisión, con el objetivo de que la Dirección General de Profesiones los certifique cada seis años.
Además comentó que países desarrollados que apostaron por este camino, notaron sus beneficios en economía, política, cultura, bienestar social, empleo, combate a la pobreza y tecnología.
Con informacion de Dinero en Imagen.