MÉXICO. Aaron Graser ató a su novia después de que ella murió de una sobredosis con drogas.
Aaron Graser se alarmó cuando la mujer no mostró signos de vida, por lo que afirmó que la ató y tuvo relaciones sexuales con ella con la esperanza de que ella despertara.
Cuando esto no funcionó, el hombre de 39 años de Connecticut, llamó a su vecino, un ex paramédico.
La policía que llegó al lugar preguntó a Graser, quién le preguntó si su arresto por asfixiar a la mujer muerta meses antes era relevante, informó reportes del Hartford Courant.
Entonces, él ofreció voluntariamente la información de que había cometido la ofensa sexual cuando un detective le preguntó acerca de las ligaduras que hallaron en las muñecas del cadáver.
La orden de arresto decía: “Aaron dijo que escuchó para ver si la víctima estaba respirando y escuchó un balbuceo.
“Aaron dijo que sabía que la víctima odiaba tener sexo con él, por lo que pensó que la víctima podría despertarse si tenía relaciones sexuales con ella”.
Se declaró culpable de agresión sexual en cuarto grado y violación de la libertad condicional, y fue encarcelado durante un año.
Los oficiales encontraron heroína y agujas en la escena de la muerte de la mujer en enero, y una investigación reveló que había muerto de una sobredosis con drogas.
Dijo que la había atado por los tobillos y las muñecas fue, porque era un “fetiche” suyo, y agregó haber escuchado como si ella hiciera gorgoteos que provenían de su cuerpo.
Los expertos creen que este fue el sonido de los gases que escapan del cuerpo en descomposición.
Con informacion de Vanguardia.