MÉXICO.- El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) informó que en la población mexicana de 18 a 29 años, el cáncer de órganos hematopoyéticos (bazo, ganglio, timo, hígado o médula ósea) causó el mayor porcentaje de muertes por tumores malignos en el periodo de 2011 a 2016.
En el marco del Día Mundial contra el Cáncer que se celebra este domingo, detalló que con un rango de 27.1 a 30.9 por ciento, se aprecia una disminución en comparación con los porcentajes que se presentan en los infantes y adolescentes para esta enfermedad.
En el caso de cáncer de testículo u ovario es la segunda de las principales causas de fallecimiento por tumores malignos en la población mexicana de 18 a 29 años, destacó el organismo en un comunicado.
Tanto este, como los tumores malignos de órganos digestivos (los cuales ocupan el tercer lugar para este grupo de edad), son neoplasias malignas que no tienen una presencia significativa en la infancia y en la adolescencia, pero que, en este punto del ciclo de vida, comienzan a despuntar.
En México, dentro del rango de edad de 30 a 59 años, durante el periodo de 2011 a 2016, los cinco principales tipos de cáncer que sobresalen como causa de mortalidad en esta población son tumores malignos de órganos digestivos, cáncer de órganos genitales femeninos, tumor maligno de mama y tumores malignos de órganos respiratorios e intratorácicos.
De esta manera, señaló, se observa que tres de cada 10 muertes por cáncer en la población de 30 a 59 años se deben a cáncer en órganos digestivos.
Para la población de este grupo de edad, el cáncer de órganos genitales femeninos (categoría que incluye al de tipo cérvico uterino y al de ovario) se ubica como la segunda causa de muerte por neoplasias malignas.
Precisó que al considerar su proporción entre mujeres, se constituye como su principal causa de muerte por tumores malignos de tal forma que en 2016 tres de cada 10 fallecimientos femeninos por cáncer se deben a este padecimiento.
Mientras que el cáncer de mama destaca como la tercera causa de muerte por tumores malignos; en las mujeres se observa el mayor impacto en comparación con los varones, debido a que dos de cada 10 fallecimientos femeninos por cáncer se deben a esta enfermedad; los datos de mortalidad entre los varones son marginales.
Respecto al cáncer de órganos hematopoyéticos se ubica como una de las principales causas de mortalidad observada por tumores malignos, pero de ser la primera en los grupos poblacionales anteriores, pasa al cuarto lugar en este grupo de población.
Para la población de 30 a 59 años como quinta causa, aparece un tipo de neoplasia maligna nueva respecto a los análisis precedentes: los tumores malignos de los órganos respiratorios e intratorácicos; en estos se incluye el cáncer de pulmón.
Respecto a los principales tipos de cáncer en varones de 30 a 59 años, los tumores malignos de órganos respiratorios e intratorácicos son responsables de cinco fallecimientos por cada 100 mil hombres en este rango de edad durante el periodo de 2011 a 2016.
Lo anterior representa la segunda causa de muerte por cáncer para esta población específica; la primera, la ocupa el tumor maligno de órganos digestivos.
De acuerdo con estudios epidemiológicos, “las personas que desarrollan la enfermedad tienen ciertas conductas o una mayor exposición a sustancias identificadas como cancerígenas”.
Por ejemplo, la evidencia médica reporta que el hábito de fumar no solo se relaciona a tumores malignos en los órganos del aparato respiratorio (primordialmente cáncer de pulmón), sino que incluso tiene efecto en el desarrollo de cáncer de vejiga, riñón, páncreas, estómago, colon, recto y cuello uterino.
Además, la obesidad genera cambios hormonales que inciden en el crecimiento celular desordenado y se le relaciona al cáncer de mama, endometrio, páncreas, riñón, colon y vesícula. El consumo de alcohol se ha asociado al cáncer oral, de esófago, mama, hígado y de colon y recto.