Nuestra breve historia del arte de Tamaulipas está en el pecho de la capital, Ciudad Victoria.
Aquí se encuentran tres obras fundamentales en la riqueza artística del estado, la hermosa pintura mural art-deco, de X Peña, en el Teatro Juárez, el mural Tamaulipas Histórico de Ramón García Zurita, en Palacio de Gobierno, y la escultura El Águila, del escultor Sebastián en el Parque Bicentenario.
Tres amores por el arte que fecundan el patrimonio artístico de este territorio “donde se reza mucho”. La obra mural de Xavier Peña, en el recinto del antiguo Cine Juárez fue cubierta sin tener la menor misericordia por la miopía de un rector de la UAT de cuyo nombre no puedo acordarme, que permitió ese atraco. La hermosa composición “La Comedia y la Tragedia”, en los muros oriente-poniente, inaugurada en 1957, durante el sexenio del gobernador Horacio Terán Zozaya, fue probablemente sellada en el año de 1970, con la venia de personajes como Alfonso Pesil Tamez, que opinaron en favor de cubrir la gran obra mural.
Por años hemos mantenido el interés porque este formidable mural pueda ser restaurado y admirado por los tamaulipecos como parte de un proyecto artístico-arquitectónico de parte de las autoridades de la UAT.
La obra Mural Tamaulipas Histórico, en Palacio de Gobierno, del joven artista Ramón García Zurita, permanece desde el año de 1962, en el brutal olvido por todas las administraciones.
Directores de cultura van y vienen sin que exista un interés y rescate de esta magnífica obra representativa de la calidad plástica de Zurita. No existe un proyecto parte del Instituto Tamaulipeco de Cultura, como no existió en las dos últimas administraciones. La obra escultórica El Águila del Bicentenario, hay que procurar su cuidado y mantenimiento. Es una obra del famoso escultor internacional Sebastián.
Y resulta paradójico, que “La Cruz” de Sebastián, que se realizó para el pueblo mágico de Tula permanezca tirada, siendo una importante pieza de arte del maestro Sebastián realizada por encargo del gobierno. Escultura que debe figurar en los anales del patrimonio artístico-cultural.
El mejor amor es la cultura, mi respeto y admiración por los maestros de arte de mi tierra, Xavier Peña, Ramón García Zurita y Sebastián que dejaron cuatro excelentes obras de arte para gloria y goce del pueblo.
