CIUDAD VICTORIA, TAMAULIPAS.- Seis ejidos conurbados de Victoria han desaparecido en los últimos años y se han convertido en fraccionamientos, zona hospitalaria, centros comerciales y centros de recreación con palapas y albercas.
La demanda de terreno ejidal continúa, por lo que ahora se está pagando bien por las tierras a los ejidatarios, dijo Roberto Báez Huerta, director municipal de Productividad Rural.
Como ejemplo citó el caso del ejido 7 de Noviembre el cual ahora se ha convertido en la colonia Américo Villarreal luego de quedar dentro de la ciudad, o el ejido Loma Alta donde está el ejido primero y después la colonia Esfuerzo Popular y Loma Alta, los que han quedado también dentro de la mancha urbana.
Una suerte similar corrió el ejido Guadalupe Victoria en sus tierras se edificó el Hospital Regional de Alta Especialidad, la zona de Pajaritos. Otro ejido que está en situación similar es Benito Juárez donde se construyó Liverpool, la agencia automotriz Chevrolet, entre otros negocios.
También el ejido El Olivo, ahora tiene el Polideportivo en el fraccionamiento Santa Regina y otros fraccionamientos que están dentro de tierra ejidal y el ejido La Presa que es donde se ubica el complejo de Seguridad Pública.
“Esperamos que con ello se pueda llegar a un consenso con ejidatarios para que sigan sembrando”.
Explicó que antes estaba prohibido que ejidatarios vendieran sus tierras, sin embargo, en el gobierno de Salinas de Gortari se reformó la ley y los ejidatarios ahora pueden vender sus tierras.