Ayer en Pachuca, Hidalgo, Andrés Manuel López Obrador tuvo que intervenir para detener una batalla campal entre sus simpatizantes que se liaban a golpes en pleno mitin, se daban entre morenistas y priistas convertidos, fue solo una imagen que se puede repetir en los próximos días a lo largo del país, imagen que veremos incluso una vez que termine la campaña no sólo entre seguidores del puntero, sino entre los diferentes ‘licuados ideológicos’ que estas elecciones nos han recetado.
Así es mis queridos boes, las bofetadas y los manotazos son ya la batalla por lo que unos y otros creen que se merecen, es la guerra por la división del botín que aún no se gana, pero que ya se jalonean entre los mismos.
Ayer oímos, más que ver, a un López Obrador desesperado gritando ya basta, ahí termina todo, fue suficiente, no caigan en provocaciones y otros llamados que eran acallados por los moquetazos que se daban entre los mismos.
“Eran unos 20 jóvenes, quienes portaban cartulinas blancas donde se leía “¡Fuera Sosa!”, en referencia a los hermanos Damián y Germán Sosa Castelán, quienes son ex militantes del PRI y del Grupo Universidad en Hidalgo”, daba cuenta REFORMA.
El riesgo de que el agua llegue al río está latente por todo el país, no solo entre los seguidores de AMLO como ya ocurrió, sino entre los grupos que hasta hace unos meses eran acérrimos rivales y hoy tienen que sobrevivir juntos en las campañas para alcaldes de todos los partidos.
Recordemos que MORENA quien ya iba aliado con el PT y el PES, de ideologías antagónicas, hoy también fueron tomados por asalto por decenas o miles de priistas que abandonaron el barco a punto de zozobrar.
De hecho la mayoría de los candidatos en los distritos y en los municipios de Tamaulipas son emanados del PRI y eso a los morenistas de a deveras pues no les ha caído del todo bien.
Pero no es privativo de la coalición pejista, porque en la que encabeza el PAN ocurre lo mismo, si bien la alianza formal es con Movimiento Ciudadano y PRD, hay municipios donde se le abrió la puerta a muchos priistas y eso ha generado tensión, encono y el peligro de que un día se agarren a trancazos.
Lo que ha ocurrió en la mayoría de los casos, es que los del PRI que han llegado a las campañas de MORENA y el PAN, lo han hecho enfundados con el uniforme de generales, muchos vendieron la idea de que se las saben de todas todas y que para eso de la transa se pintan solos y se las compraron.
El resultado: muchos panistas de toda la vida los ven con recelo, los ven como trepadores y se han hecho a un lado.
Pero al mismo tiempo, verdaderos morenistas y panistas se alistan para, por todos los medios tratar de impedir que una vez que se ganen las elecciones, los tricolores les quiten lo que al menos por derecho de antigüedad les pertenece.
Y aquí habría que recordar todo el movimiento que se hizo por los panistas cuando el actual gobernador derrotó al PRI y accedió al poder. Se crearon al menos dos páginas donde los azules señalaban a los priistas que intentaban quedarse con los espacios que ellos reclamaban como suyos.
Me refiero por ejemplo a la página Verdadera Gente con Cabeza de Vaca o Gente con Cabeza de Vaca, donde a diario ‘quemaban’ a los priistas que de pronto se habían convertido al panismo para tratar de mantener privilegios en las estructuras estatales.
Bueno pues, además de los golpes, eso puede repetirse ahora en la elección por las alcaldías y sino para el baile vamos.
Es el riesgo de abrir las puertas de par en par y no formar a los tricolores en la fila, tras los azules ya formados desde hace años.
Insisto, el riesgo es para lo que queda de la campaña, pero también para cuando ya se haya ganado la elección, insisto por la coalición que sea, porque parece que no se pusieron reglas a los recién llegados, porque nadie hizo un proceso de limar las asperezas naturales que los de oposición tenían con los del PRI y porque en la mayoría de los casos, insisto, éstos llegaron a mandar y no a servir.
Por eso creo que los candidatos ganadores van a tener algunos dolores de cabeza una vez que tengan que repartir los huesos, aquello podría terminar en una batalla campal como la de ayer en Pachuca.
Almaraz y Cabeza de Vaca…
Ayer estuve atento al encuentro de los candidatos a la alcaldía de Victoria que organizó la COPARMEX, había poco que llamara la atención, porque a lo largo de las semanas uno hasta se aprende los enunciados completos de los aspirantes, las propuestas y las ocurrencias de unos y otros.
Pero me llamó la atención que de los cinco candidatos: Xico González Uresti, del PAN; Lalo Gattás, de Morena; Mario Arizpe, del Verde; Nayma Balquiarema, independiente y Óscar
Almaraz del PRI, sólo éste hizo referencias a trabajar en conjunto con el gobernador Cabeza de Vaca.
Una y otra vez el alcalde repitió la chamba conjunta con el gobierno de los vientos del cambio y hasta reconoció el apoyo de Cabeza de Vaca durante el año y cacho de gestión. Habrá que decirles al resto de los comparecientes que en la capital se cogobierna.
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