Finalmente aunque demasiado tarde el presidente de la república ENRIQUE PEÑA NIETO reconoció y lamentó muchos de sus errores cometidos a lo largo de su agonizante sexenio, errores, que indudablemente de nada ayudan, sin embargo dirían los románticos, pero lo hizo.
Cómo olvidar por ejemplo uno de ellos y que marcará parte del derrotero de su administración tan es así, que tanto él como toda su familia lo llevará a donde
quiera que vaya, donde quiera que se encuentren, el tema de la casa blanca propiedad de la primera dama ANGÉLICA RIVERA.
Cómo olvidar que el caso desató la ira ciudadana y que desde el mismo momento que se descubrió y hasta hoy, sigue siendo uno de los escándalos más comentados de los últimos mandatos presidenciales.
En aquel entonces se le aconsejó al presidente enfrentar y dar la cara a los medios y a la ciudadanía para explicar el caso, sin embargo no lo hizo siendo finalmente su esposa quien lo hiciera ante una indignada opinión pública, que nada o poco creyó de lo que intentó decir de aquel bochornoso pasaje.
Hoy al paso de los años el presidente admite haberse equivocado de no haber sido él quien enfrentara la situación y por ello se disculpó.
Lo mismo pasó ante el famoso gasolinazo del cual también asume la culpa, sólo que éste tuvo efectos devastadores pues con tal medida afectó directamente los bolsillos de millones de mexicanos que repudiaron al instante y dicha acción.
La primera actitud sin duda una frivolidad más de las muchas que envolvieron su gobierno, pero la segunda fue el caso total.
El resultado de ambas y otras acciones más, fue el castigo reflejado en las elecciones pasadas donde el PRI sufrió la peor derrota electoral que se tenga memoria, ahí, los mexicanos y mexicanas simplemente respondieron a la insensibilidad mostrada.
Tardías las lamentaciones y arrepentimientos del presidente PEÑA NIETO sobre todo, porque en tiempo y forma se lo hicieron saber, sin embargo cegados por el poder y envuelto en una infinita soberbia, no atendió ninguna recomendación, por el contrario.
En fin el presidente se despidió de su gabinete y de la ciudadanía mexicana manifestando sus logros y enalteciendo su gestión administrativa, dijo “si algo van a decir de mi, que sean temas verdaderos”.
Todo ello ocurre sin contar que dejó pendiente sin duda el problema más brutal que padece y angustia a casi todo el país, la inseguridad.
Aunque en este renglón a fuerza de ser sinceros, mucho contribuyen los gobiernos estatales y municipales que poco o más bien nada hacen para al menos intentar
atacar dicho flagelo.
Por otra parte a muchos escandaliza que en los últimos meses el mandatario federal haya comenzado a quedarse solo, sin que nadie lo acompañe en la última parte de su mandato.
Nada nuevo sin duda lo que sucede en torno a sus “colaboradores”, “amigos” y “amigas”, partiendo de la premisa que es común que abandonen el barco cuando este se hunde, así se practica la política en el país.
Lo mismo pasa en cualquier cambio de poder en México, así sea federal, estatal o municipal peor aun, pues cuando merodea el fantasma de la cárcel, es cuando surge la tenebrosa frase “llegó la hora de la traición”.
En otras cosas respecto al cambio de la nueva dirigencia priista, la novela parece continuar, en ese sentido trasciende que uno de los actores principales estaría fuera de la jugada y sería el aún delegado de la SCT en San Luis Potosí CÉSAR GARCÍA CORONADO.
Ahora existen datos duros que indican que permanecía en la puja la neoladerense YAHLEEL ABDALA sumándose en la recta final ENRIQUE CÁRDENAS DEL AVELLANO.
Sin embargo a juzgar por la pachorra que muestra la jerarquía priista, no se ve para cuando el gran “dedo” vaya a decidir quien habrá de sustituir a SERGIO GUAJARDO MALDONADO.
Por cierto este último no solamente mal dirigió al priismo en la entidad producto de sus malas decisiones pues no hay a quien echarle ahora la culpa de su fracaso, sino que tiene ya “tiros” cantados con connotados militantes.
En otro punto lo hemos citado en varias ocasiones, existe fuerte discrepancia, enojo y lo que sigue, en algunos colaboradores del alcalde electo XICOTÉNCATL GONZÁLEZ URESTI, debido a que no han sido tomados en cuenta en la conformación de la estructura que habrá de acompañarle en su administración.
Son principalmente familiares de algunos funcionarios de la actual administración estatal, quienes se están llevando los cargos más relevantes, dicen, que el compromiso es sólo por un año, pero mientras son peras o manzanas, se quedan en el camino personas que se la “partieron” en la campaña, nada nuevo pues exactamente sucedía lo mismo con gobiernos opositores.
En tanto en H. Matamoros el alcalde JESUS DE LA GARZA enfrenta tal vez el momento más complicado de su gestión y vaya que ha habido de todo.
Sin embargo esta vez la situación es distinta, ahora se preparan para denunciarlo penalmente, cuestión de días para que suceda.
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